Freír las patatas es probablemente la versión más conocida y extendida de hacer este tubérculo. Como sabes, es originario de América y es uno de los cuatro alimentos principales a nivel mundial. Es decir, está prácticamente en todos lados, todo el mundo las come. De hecho, es tan famosa esta forma de cocinarlas que hay hasta un Museo de la Papa Frita en Bélgica. Y una buena forma de mejorarlas y darles otro toque y aroma es hacerlas con cerveza. Sin duda, te va a encantar la receta.
La verdad es que no es nada difícil realizar esta receta, prácticamente todos sabemos hacer este tubérculo frito y lo hemos hecho alguna vez. Sin embargo, juntarlo con otra de las bebidas básicas de la población mundial es un truco perfecto. Sigue leyendo este artículo y vamos a explicarte paso a paso cómo poder hacerlo.
3Preparación
Pelar las patatas y cortarlas en dados. Después calentar una sartén a fuego medio, con abundante aceite para freír. Dorar las patatas. Deben quedar tiernas, no demasiado doradas. Escurrir las patatas fritas en papel de cocina y reservar. En otra sartén, calentar dos cucharadas de aceite. Corta la cebolla en juliana fina y sofríe durante cinco minutos, hasta que se vean transparentes. Agrega los champiñones cortados en láminas.
Saltea durante dos minutos. Añadir la cerveza, dejar que reduzca el alcohol durante un momento y verter la crema y el ketchup. Remover para integrar todo. Subir el fuego y cocinar la salsa hasta que la crema rompa el hervor. Salpimentar a gusto. Sirve las patatas bañadas en la salsa de cerveza y presenta el plato espolvoreado con pimentón. Prepara patatas a la cerveza para compartir con tus amigos mientras ven una película o un partido de fútbol. Son perfectas como aperitivo, sabrosas, con un ligero toque picante que gusta a todo el mundo. Por supuesto, que no falte una rica cerveza helada para acompañar.