Comprar pescado tiene su ciencia, debido a que es un producto que no dura demasiado tiempo fresco antes de comenzar a ponerse malo. Si lo compras en el día, se tiene que comer al instante o congelarlo en vez de dejarlo en la nevera. Si no se realiza, se corre el riesgo de que huela mal.
Sin embargo, aprender a diferenciar entre el pescado que huele a mar y el que tiene un olor tan insoportable es la clave para conocer si está en buen estado o lo mejor es dejarlo en la basura. En el artículo de hoy, te contaremos un truco para recuperar el pescado que huele y disfrutes de deliciosos platillos. ¡Comencemos!
2El pescado pasado tiene un mal olor
Cuando el pescado empieza a deteriorarse, emite un fuerte olor que recuerda al amoníaco, característico y fácil de conocer. Mientras que, el pescado fresco tendrá un olor salino y penetrante que puede ser intenso y potente, pero nunca tan desagradable que sea insoportable. ¡Así sabrás que el pescado está en buen estado!
Si no puedes comprobar el olor o no estás seguro de si es bueno, puedes entonces fijarte en otras características del producto.
