El hígado graso se caracteriza por acumulación de grasa en las células del hígado. Es normal que el hígado tenga grasa por sí mismo, pero esto no causa síntomas de enfermedad. El exceso de grasa puede provocar una inflamación conocida como esteatohepatitis, aunque no suele tener relación entre la cantidad de grasa presente y la inflamación. La esteatohepatitis puede provocar cirrosis y existe una relación con el cáncer de hígado.
Se desconocen las causas específicas de la HGNA y la EHNA. Sin embargo, es probable que los factores que provocan cambios en el hígado se produzcan en un orden determinado:
- Tiene sobrepeso u obesidad.
- El sobrepeso provoca resistencia a la insulina: las células del cuerpo no permiten que la insulina transporte el azúcar al interior de la célula.
- Se desarrollan depósitos de grasa en el hígado.
- Algunas personas desarrollan una inflamación en el hígado debido a los depósitos de grasa. Esto se llama esteatohepatitis no alcohólica o EHNA.
- La EHNA puede producir tejido cicatricial en el hígado.
El hígado graso puede estar causado por ciertos compuestos químicos, trastornos nutricionales o endocrinos y por factores genéticos. Los fármacos y compuestos químicos que pueden causar hígado graso son el alcohol, la tetraciclina, el metotrexato, el ácido valproico, la cortisona y los medicamentos similares a la cortisona, el tetracloruro de carbono y otros disolventes.