Durante la pandemia, cantidad de personas cambiaron sus despachos u oficinas por diferentes zonas de trabajo en sus propios hogares. Los confinamientos y las medidas sanitarias han requerido de cantidad de precauciones relacionadas con el contacto físico, algo que cambió nuestras vidas durante un largo periodo de tiempo en el aspecto social y también laboral.
Ahora las circunstancias son otras y la vuelta al trabajo presencial es prácticamente general, hasta en los sectores que alargaron en todo lo posible la modalidad en remoto. Algunas personas creen que este nuevo cambio puede ser negativo o que realizar su actividad en casa es más beneficioso después de todo este tiempo. Sin embargo, la realidad es que acudir todos los días a la oficina tiene cantidad de ventajas.
Los beneficios del trabajo presencial
Lo cierto es que trabajar presencialmente en su totalidad o en determinadas circunstancias va a ser muy positivo desde diferentes perspectivas, para el negocio y para los profesionales involucrados. Estos son algunos de los beneficios más destacados.
El aspecto colaborativo
En este tiempo hemos encontrado nuevas formas de colaborar a distancia y herramientas digitales que nos facilitan este proceso. En cambio, al perder el contacto directo nos estamos perdiendo algunos matices de la colaboración en equipo, las tareas inmediatas y simultáneas que se pueden hacer en determinados momentos y las tormentas de ideas cara a cara.
Comunicación de calidad
Muchos matices de la comunicación se pueden perder en los chats, en el teléfono e incluso en las videoconferencias. Estar frente a otras personas nos permite comunicaros con mucha claridad, sin agendar los encuentros y captando todos los elementos del diálogo: desde la expresión corporal hasta el tono de voz.
Apoyo en el equipo
Sentir el apoyo del equipo es mucho más sencillo en persona y hace de cualquier trabajo algo mucho más agradable. En el trabajo presencial se puede pedir ayuda con rapidez, hacer preguntas de forma directa y espontánea, e incluso tomarse un pequeño receso para solicitar consejo a un compañero y que este brinde apoyo.
Motivación
Por todo lo anterior, el trabajo presencial llega a ser bastante más motivador. Esto ocurre especialmente en esos días en los que no nos apetece demasiado arrancar, y en los que podemos recuperar las ganas a vernos junto a un equipo involucrado que trabaja codo con codo con nosotros.
¿Cómo volver a hacer negocios en persona?
Estos beneficios se pueden aprovechar sin tener que volver al 100% al trabajo presencial como se hacía antaño. Actualmente, muchos profesionales se están volviendo a modelos híbridos o flexibles que permiten disfrutar las ventajas de cada modalidad. Para ello, basta con buscar un alquiler de despacho que se adapte a tus necesidades y echar mano de él en los momentos en los que desees hacerlo o cuando quieras reunirte con otros compañeros.
En centros de negocios como GSG Business Hub puedes acceder a oficinas con todas las comodidades a las que acudir solo cuando quieras hacerlo, con la libertad horaria que te marques o que decida tu empresa. También cuentas con otros beneficios como las salas de reuniones, para hacer vida con clientes o socios siempre que lo necesites. Es uno de los formatos de trabajo más interesantes hoy en día.
