La ropa interior es la prenda de vestir que se encuentra más en contacto con las zonas húmedas de nuestro cuerpo, y por ello, quizás es de las prendas que debes cambiar con mayor frecuencia, porque son capaces de producirnos irritaciones, mal olor e infecciones si no nos las cambiamos regularmente.
5El incremento de la secreción
En el caso de ambos sexos, es posible que se experimente un incremento en las secreciones de los fluidos, así como en las descargas sobre las que no se puede tener control, y ello causa igualmente que se incremente la humedad en la ropa interior, y esa puede ser la razón para que aparezcan escozores y sarpullidos.
Cuando los causantes de esos escozores y sarpullidos entran en contacto con los genitales, las bacterias que las producen pueden conducir a la aparición de infecciones más serias y de otras afecciones. Y el remedio es muy simple, sólo hay que mudar la ropa interior a diario.