Un hábito común de muchas personas es orinar en la ducha, afirmando que lo realizan porque ahorran agua, les dan ganas en el instante que van a bañarse, o solo quieren disminuir el tiempo para ir al trabajo. Sin embargo, esta práctica además de ser antihigiénica, puede conllevar muchos problemas de salud en el futuro que a simple vista no se aprecian.
Por ello, en el artículo de hoy te contaremos por qué no debes orinar en la ducha, sus peligros, y cómo puedes prevenirlo. ¡Comencemos!
4¿Es posible que se produzca incontinencia por orinar en la ducha?
Uno de los aspectos negativos de orinar en la ducha es que este deseo de ir al baño puede llegar a convertirse en incontinencia urinaria. Tal problema conlleva a que no puedas controlar tu vejiga y se libere la orina de forma involuntaria.
No importa el control que tengas sobre tu cuerpo, si vuelves una rutina orinar todos los días mientras te bañas, esto se convertirá en un hábito y quedará grabado en tu cerebro como algo normal. De manera que, cada vez que oigas el sonido del agua, tu vejiga entenderá que es momento de ir al baño.