San Francisco Javier fue un miembro de la Compañía de Jesús, un presbítero cuya función como misionero fue reconocida por la Iglesia Católica. El Instituto Nacional de Estadística español nos indica que el día de hoy deben ser felicitados aproximadamente unos 600.000 caballeros, y seguramente tienes entre tus familiares, amistades y conocidos a algún Francisco, Francisca, Francisco Javier o Javiera, así que no puedes perder la oportunidad de felicitarlos por su onomástico el día de hoy.
San Francisco Javier
San Francisco Javier fue un jesuita misionero de origen español, que fue canonizado por el Papa Gregorio XVI en 1622, junto con figuras católicas tan renombradas como San Felipe Neri, San Isidro Labrador, Santa Teresa de Jesús y San Ignacio de Loyola, el padre fundador dela Compañía de Jesús, a la que pertenecía San Francisco Javier.
San Francisco Javier fue hijo de unan familia oriunda de Navarra con muchos recursos, debido a que su padre era profesor de Derecho y un reconocido especialista en las negociaciones de política, mientras que su madre era de origen aristocrático. Cuando cumplió los 20 años de edad, San Francisco Javier se marchó a estudiar a la ciudad de Paris, logrando graduarse en los estudios de Letras y de Filosofía.
Pero fue su contacto con otros estudiantes y con los hombres de fe en París lo que lo hizo entrar en contacto con la religión y seguir el camino eclesiástico, con la motivación de poder alcanzar algún día la santidad. Esta vocación fue alentada por el fundador de la Compañía de Jesús, el propio San Ignacio de Loyola, con quien logró trabar conocimiento.
Antes de ordenarse como sacerdote, tuvo la oportunidad de formarse religiosamente en el barrio de Montmarte de París, y en la ciudad de Roma, donde tuvo la oportunidad de llegar a trabajar como secretario, bajo las órdenes de su mesto y guía.
A poco tiempo, se le ordenó que se trasladara a Portugal, en donde pasó un año, siendo pate de un viaje que fue promovido por el propio papa Paulo III, para que ayudase al rey de Portugal, Juan III a expandir sus dominios y a cristianizarlos, desde Brasil, la India y hasta Sri Lanka.
San Francisco Javier llegó a ser conocido con el sobrenombre del ‘Apóstol de las Indias’, según lo que se recoge en la tradición católica, por todas las misiones que tuvo que desempeñar, en esos países y en los territorios próximos, a donde pudo llevar la palabra de Dios, visitando todas las comunidades que pudo, para poder impartir sus conocimientos.
Primer misionero español en Japón
San Francisco Javier fue el primer misionero español que pisó Japón, cuando en el año 1549 llegó a Kagoshima, en la isla Kyushu, llevando siempre por delante las enseñanzas del cristianismo, pasando allí otro año, que aprovechó para fundar una bastante concurrida comunidad cristiana. Encontró la muerte cuando se dirigía a China, en particular a la isla de Shanghuan, situada frente a las costas del sur del país asiático.
Pero, las noticias sobre la muerte de San Francisco Javier no llegaron a la ciudad de Roma, hasta pasados tres años de ocurrida. Tan sólo las obras que pudo realizar San Francisco Javier, en nombre de la Compañía de Jesús, justificarían un día del Santoral, no obstante, es necesario que el Santoral Católico del 03 de diciembre tiene que completarse con los nombres de otros santos y beatos, entre los que podemos mencionar:
San Ambico, San Birino, San Casiano de Tánger, San Claudio tribuno, San Crispino mártir, San Galgano, San Jasón, San Lucio eremita, San Mirocles, San Sofonías, Santa Atalia, Santa Hilaria, Santa Magina, Beato Eduardo Coleman y Beato Juan Nepomuceno De Tschiderer.