Todos, en algún momento, hemos sufrido de dolor de garganta, incluso hay personas que padecen de manera muy frecuentes de esta dolencia, por causa del estado en que se encuentran sus amígdalas, ya que estas son las primeras defensas del cuerpo con relación a todo lo que nos llevamos a la boca.
Es por ello que los niños son particularmente sensibles a este tipo de dolencias, sobre todo cuando son pequeños, porque se llevan las manos junto con todo lo que tengan en la mano a la boca, incluso lo que hayan recogido del piso en la casa o en el lugar en el que estén jugando, por eso es importante conocer lo que puedes hacer para aliviar el dolor de garganta.
¿Cómo se presenta el dolor de garganta?
Normalmente se presenta como una molestia al tragar, debido a que las amígdalas pueden estar inflamadas, y se acompaña con otros síntomas como un picor o una sensación de ardor que es bastante desagradable, y puede estar acompañado de otros signos cuando se sufre de un virus o de un resfriado.
Pero si no se trata de un caso muy serio, es posible que el dolor de garganta se pueda aliviar utilizando algunos métodos, sin que tengas que ir corriendo al médico, y aliviar el dolor de garganta sin medicamentos, entre los que podemos mencionar:
Realizar gárgaras con agua y sal
Calienta un poco de agua y agrégale sal, cuando esté tibia, puedes hacer gárgaras con esa disolución, lo que te ayudará a aliviar la irritación de garganta, porque la sal hace que se extraigan las mucosidades que se encuentran en los tejidos que están inflamados, lo que, sin duda, aliviará el dolor de garganta.
La proporción que debes emplear es de media cucharadita de sal en medio vaso de agua tibia. Revuélvelo hasta que la sal se haya disuelto, y haz las gárgaras con la mezcla por varios segundos, escupe y vuelve a repetir la operación hasta que se termine el agua. Este método es totalmente natural y se puede hacer más de una vez al día.
Puedes chupar pastillas para aliviar la garganta
Hoy se pueden encontrar pastillas que contienen mentol en casi cualquier parte y son de venta libre. Lo bueno del mentol es que adormece los tejidos de la garganta, proporcionándote un alivio temporal para el dolor de garganta, así como para el ardor, ayudándote en un momento de apuro.
Estas pastillas incrementan la producción de saliva, ayudándote a que tu garganta se mantenga humedecida, pero debes recordar que sólo será un alivio temporal y que vas a requerir de procedimientos o métodos adicionales para librarte del dolor de garganta.
¿Tienes analgésicos de venta libre en tu casa?
Es posible que el dolor de garganta que tengas sea producto de un virus, y éstos no se pueden tratar tomando antibióticos, ya que éstos sólo funcionan contra las bacterias, mientras que los virus deben dejarse pasa y seguir su curso hasta que sean eliminados por las defensas naturales de tu organismo.
Una inflamación de garganta puede ser tratada con ibuprofeno o naproxeno, para reducir la hinchazón de garganta, aliviando al mismo tiempo el picor y el dolor.
Toma miel
Cualquier te o infusión caliente, endulzada con miel, calma las irritaciones y el dolor de garganta, además, al mismo tiempo estarás hidratando tu organismo, que es otro aspecto importante a tener en cuenta cuando sufrimos de molestias en la garganta.
El té verde es ideal, por sus propiedades antibacterianas, analgésicas y es rico en antioxidantes, ayudando a disminuir la inflamación, y la miel es una conocida supresora eficaz de la tos, teniendo tan bien efecto como un medicamento que se venda libremente.
Compra un espray que contenga equinácea y salvia
Un espray que contenga equinácea y salvia alivia las molestias producidas por un dolor de garganta tan bien como lo hace cualquier producto aerosol medicinal de venta libre.
No descuides la hidratación
Mantener una buena hidratación es una parte esencial para poder combatir un dolor de garganta, ya que cuando nos deshidratamos, el organismo no produce la saliva y la mucosidad que se requieren para que la garganta se mantenga hidratada y lubricada de manera natural, ya que sin ello, la inflamación y las molestias empeorarán. Evita consumir café o alcohol, porque causan deshidratación.
Otra forma de hidratarte
Si tienes un humidificador en casa, préndelo, porque respirar aire húmedo te ayudará a calmar el dolor de garganta, calmando el tejido inflamado, pero si no tienes este aparato, puedes encerrarte en el baño y abrir la ducha con agua caliente, aprovechando el vapor que sale de ella, respirándolo, y producirá el mismo efecto.
Si no quieres usar la ducha, puedes abrir el agua caliente en el lavamanos y colocarte encima de la cabeza una toalla, encima del lavabo, para atrapar el vapor y respirarlo profundamente por varios minutos. Esta operación la puedes repetir cuantas veces sea necesario, para aliviar tu dolor de garganta.
Otra manera de usar el mentol
Puedes poner a hervir agua en una olla por treinta minutos, cerrando todas las ventanas de tu casa, y agregarle al agua hirviendo una cucharada de cualquier ungüento que tenga mentol, así el aire se llenará no sólo de vapor sino de un aroma que te descongestionará, ayudándote al mismo tiempo a aliviar el dolor de garganta.
Hay que elevar la cabeza
Si además del dolor de garganta, sufre una congestión nasal, debes colocar almohadas adicionales bajo tu cabeza, porque esa altura adicional te ayudará a respirar mejor. Así cuando la congestión se alivie, no tendrás que dormir con la boca abierta, lo cual te resecará totalmente la garganta, empeorando la situación.
¿Qué hacemos si se trata de un niño?
Como dijimos antes, los niños son muy propensos a sufrir de dolor de garganta, y si es causado por un virus, con mantenerlo bien hidratado, con una alimentación adecuada y algunas de las medidas que antes hemos mencionado, en unos cuatro cinco días deberá mejorar.
La situación es totalmente diferente si el niño tiene fiebre, porque eso requiere que lo lleves al pediatra de inmediato, ya que la fiebre puede ser un signo de una infección, como una faringitis producida por un estreptococo, que es una bacteria, de modo que el tratamiento que debe administrársele es el de los antibióticos que sean recomendados por su médico.
Esto, junto con las gárgaras de agua con sal, si tiene seis años o más, y los analgésicos infantiles pueden ser suficientes para aliviarlo. Además, procura darle líquidos calientes, como infusiones endulzadas con miel o sopas, pero jamás uses un espray para garganta, ya que suelen tener anestésicos como la benzocaína o anbesol, que podría causarle una reacción alérgica.