Cómo lo estás leyendo, tus pies pueden avisarte que estás en riesgo de sufrir un infarto, y lo que tienes que hacer es simplemente observar las señales, porque como ocurre con muchas otras partes de nuestro cuerpo, suelen reaccionar a determinadas clase de estímulos, lo que hace que, si estamos pendientes, se prenda la alarma de que nos encontramos en riesgo.
Resulta que los pies pueden ayudarnos a detectar esa alarma, dándonos señales claras, enviadas por el organismo de modo que podamos entender que posiblemente estamos en peligro de sufrir un infarto al miocardio.
8¿Hay factores de riesgo que deben ser tenidos en consideración?
Como ocurre en todas las condiciones, enfermedades o dolencias que puede sufrir una persona, en los casos de infarto al miocardio, lo mejor es que estemos pendientes de la prevención, aplicando los métodos y los consejos adecuados, comenzando por reducir, o mejor aún, eliminar todo lo que sean factores riesgo.