El producto interior bruto o PIB es algo que se menciona cada vez que tratan de explicarnos algo sobre la economía de un país, porque aparentemente es una variable con la que nos tratan de explicar si vamos bien o si vamos mal, como si nosotros supiéramos lo que significa, o como se mide o qué representa, y por eso hoy lo vamos a explicar.
¿Qué es el producto interior bruto?
Productor interior bruto o qué es el PIB, se trata de un término que se emplea mucho en economía y se trata de un parámetro que se utilizan para medir y comparar las cifras de su economía, con las de otros países.
Se trata de uno de los índices que es más importantes, porque muestra el valor monetario de los bienes, ya sean textiles, maquinarias, coches o alimentos, así como el coste de los servicios, como el docente o el sanitario, que se producen dentro de un determinado Estado en un período determinado.
Puede ser establecido por organizaciones privadas o públicas, extranjeras o nacionales, ya que lo que se requiere es analizar el coste final de un bien o servicio específico en un país y su comparación con lo que costaba el mismo al inicio del período o en relación con el coste del mismo producto en otro país. El reciente conflicto bélico ha causado que el Este de Europa y Alemania se tambaleen, con caídas en el PIB y riesgo de recesión.
Veámoslo con un ejemplo
Si queremos establecer como ha crecido, o si efectivamente ha crecido la industria textil en un país concreto, de cara a poder establecer su influencia en el producto interior bruto, lo que se hace es tomar los datos de esa industria en dicho país, pero sólo contará como la unidad de producción el producto final, esto es, la pieza de vestimenta, sin tomar en cuenta que ciertas materias primas sean importadas.
Se toman los datos de producción del inicio y del final de un período y se puede evaluar la forma en que ha evolucionado el consumo de los individuos, las inversiones que se han hecho en el sector y cómo afecta la actividad a lo que se llama la balanza comercial, lo que puede obtenerse restando las exportaciones a las exportaciones.
Así, si el balance resulta ser positivo, entonces el PIB va a mostrar una situación en la que ha ocurrido un crecimiento económico, de modo que las inversiones se verán estimuladas, se creará más empleo, y otros beneficios para la sociedad.
En cambio si la cifra es de signo negativo, entonces eso muestra que la economía del Estado de que se trate está pasando por una fase de estancamiento económico en el sector textil, y hasta es posible que de recesión si durante dos trimestres se mantienen cifras negativas en esa actividad.
¿Quién realiza normalmente este cálculo?
Normalmente, quien realiza el cálculo del producto interior bruto lo hace una oficina que pertenece a la organización del Gobierno, y en cada país hay una, normalmente de manera trimestral, pero los resultados son evaluados anualmente. En España la institución encargada de estos cálculos es realizada por el Instituto Nacional de Estadística.
Pero existen organizaciones internacionales o supranacionales que tienen la función de realizar una auditoría a las informaciones que ofrece cada Estado, con la finalidad de poder corroborar que las cifras son ciertas. Si nos referimos a la Unión Europea, esta actividad la realiza la Oficina Europea de Estadística, que es conocida por el nombre de Eurostat.
¿Las cifras del producto interior bruto son exactos?
No. Se trata de cifras que son aproximadas, porque siempre van a existir datos que, al no poder ser registrados, no pueden ser incluidos en el cálculo. Una de ellas puede ser lo que se denomina el atoconsumo, que es el caso de aquellos individuos que cultivan sus propias hortalizas y verduras y las consumen en su alimentación, de modo que no las compran en el mercado.
Otro elemento que no puede ser incluido en el cálculo del producto interior bruto es lo que se llama la economía informal o economía sumergida, porque se trata de transacciones o negociaciones económicas que no son declaradas en los organismos competentes, como es el caso de las oficinas de impuestos.
¿Hay clases de producto interior bruto?
Si. En realidad gay dos clases de tipos de producto interior bruto, que son el producto interior bruto nominal, que muestra el resultado del valor económicos de los servicios y productos finales, tomando en consideración los costes fijados en el lapso de tiempo que se analiza, para lo cual se toman en consideración asuntos como la inflación.
El otro tipo es el producto interior bruto es el real. Con esta cifra se logra determinar la constante de los costes de los servicios y de los productos, logrando eliminar la influencia que provocan otros aspectos en la variación de los precios.
¿Qué es el producto interior bruto per cápita?
Se trata de un indicador económico que se obtiene al dividir la totalidad de la cifra del producto interior bruto, normalmente en la manera nominal, estimada tomando en cuenta los costes vigentes y constantes en un país, entre el número total de sus habitantes.
El resultado será un dato que va a reflejar los índices de la riqueza de su población a nivel de la Nación, pero este índice siempre será objeto de discusión política, debido a que es absolutamente conocido que el reparto de las riquezas de un país siempre será desigual.
¿Cómo se puede incrementar el producto interior bruto?
Cuando se incrementa el producto interior bruto de una nación se considera un signo positivo de la actividad productiva del mismo, y eso demuestra que su economía va avanzando en la dirección que debe ser, pero es necesario que los productos y los servicios que se toman en cuenta para la determinación del mismo sean sostenibles a un plazo largo.
Si se quiere incrementa el producto interior bruto de una nación se pueden implementar algunas fórmulas, como puede ser que el gasto público de un país se invierta en infraestructura, investigación e innovación. Se ha demostrado que todo ello son engranajes del motor de crecimiento.
Otra fórmula que funciona bastante bien es incrementar las exportaciones, para facilitar que se abran los mercados internacionales, dando, por supuesto, garantías de una justa fiscalidad, una buena seguridad jurídica y unos tipos de interés que sean bajos, lo que resulta bastante atractivo para las inversiones, y entonces se pone a andar un motor que va a funcionar sólo.