Hay escenas de acción tan épicas, que no importa la cantidad de años que hayan pasado, ni qué edad teníamos cuando las vimos, porque se han quedado fijadas en nuestra memoria y no han podido ser repetidas, aunque se ha tratado de emularlas en otras películas, pero no han logrado el mismo efecto en nosotros.
6Acción sangrienta por todos lados
Thurman salta, se arrastra y vuela, la emoción no proviene de lo que pasará sino de cómo pasará. Sangre por todas partes, cientos de planos tomados en unos ángulos que nos parecen imposibles desde el punto de vista humano, hacen que Tarantino haya podido reivindicar no la magnificencia de la violencia, sino de la violencia en el cine. Una secuencia de que no deja indiferente a nadie. El leit motiv es que la venganza no sólo es retroactiva, sino también satisfactoria.