La sopa de ajo es una de las tantas sopas y caldos que reinan en los días fríos del invierno y junto a la sopa de cebolla es una de las más tradicionales y además, aunque su nombre indique que lleva ajo, la verdad es que su sabor es bastante suave y delicioso.
Los días de invierno ya se encuentran cada vez más cerca y los fríos y nevadas se hacen parte de la rutina diaria en muchas regiones de España. El frío es cada vez más abrumador y es por esto que consumir una buena sopa de ajo bien caliente puede devolver el alma al cuerpo. Quédate a conocer esta receta sencilla y de la abuela para calentar estos días.
8Continúa con la cocción de la sopa de ajo
Cuando tengas las rebanadas de pan de hogaza listas, añádelas a la sopa, sumérgelas y remueve muy bien para que absorban todo el caldo. Con esto lograrás darle consistencia a la sopa y un sabor fantástico.
Remueve un par de veces y deja que la sopa de ajo se siga cocinando durante 15 minutos. De esta manera, las rebanadas de pan se fusionarán perfectamente con el caldo y tendrán la consistencia deseada.