España vive las consecuencias de una inflación al alza y, pese a los esfuerzos del Gobierno con nuevas medidas implantadas, como la rebaja fiscal del IRPF para los más vulnerables, la última de las solicitudes del Partido Popular sigue sin gustar en el seno del gabinete central.
Hablamos, en todo caso, a lo que se refiere como el deflactar el IRPF a la altura de la inflación, pero esto es algo que los de Pedro Sánchez no contemplan, por ahora, bajo ninguna circunstancia.
Este, como tal, es un hecho catalogado por la oposición como «una losa para todos los españoles«, como se refirió recientemente el líder del partido de Génova, Alberto Núñez Feijoo. Y es que, como tal, esta se presume como la receta fiscal ‘estrella’ de la derecha para luchar contra el impacto de la inflación, y que sería más bien otra forma de reducir el tributo sobre la renta si no suben los sueldos.
La derecha busca su ‘medida estrella’ del IRPF, pero el Gobierno no piensa lo mismo
Asimismo, son ya varias las comunidades que han anunciado que deflactarán la tarifa en el tramo autonómico, como ya lo ha anunciado el presidente de la comunidad Valenciana, Ximo Puig. De hecho, ha sido el propio socialista el que, entonces, optó por dar un paso adelante…
Pero del que el Gobierno todavía no ha dado una muestra de satisfacción ante esta medida del IRPF. Es así, también, que fue la propia portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, quien ha pedido a todas las comunidades a llevar a cabo una política fiscal «responsable».
Esto llega después de que sean comunidades como las de País Vasco, Madrid, Andalucía y la Región de Murcia las que ya lo hayan anunciado, o que Galicia y Castilla y León se hayan inclinado directamente por una rebaja en esta figura del IRPF.
Todas ellas, a excepción del País Vasco, que le trasladó al Ejecutivo de Pedro Sánchez la necesidad de tomar esta medida ya durante el mes de abril. Pero el Gobierno se negó, como también se negó cuando Ciudadanos propuso lo mismo tiempo antes.
Qué es deflactar el IRPF
Con todo, el sistema fiscal español reparte la recaudación entre diferentes administraciones y, en el caso del IRPF, este reparto se produce entre el Estado y las regiones. Es por esto que sean algunos gobiernos autonómicos los que hayan planteado esta posibilidad.
Actualmente, Hacienda estructura este impuesto de los contribuyentes en tramos: el primero va de los 0 a los 12.450 euros que tributa al 19%, mientras que el segundo tramo empieza de esos 12.450 euros y llega hasta los 20.200 euros para tributar al 24%. Antes de los tramos superiores está el tercer tramo, que lo hace desde los 20.200 a los 35.200, quienes llegan a tributar al 30%.
A partir de esto se deflactaría el IPRF. Ello supone eliminar los efectos producidos por los cambios en los precios, lo que hace que, en vez de tomar la magnitud en términos nominales, se tomará en términos reales corrigiendo los valores con los que se fijaban esos tramos del IRPF. O lo que es lo mismo: la deflactación modifica los tramos del IRPF para ajustar la progresión del impuesto a la progresión del coste de la vida.
El Ejecutivo insiste es que no es una medida que permita beneficiar a un trabajador que cobre el SMI
En este sentido, y como ya explicaron el pasado mes de septiembre ante esta propuesta, el Ejecutivo insiste en que «no es una medida que permita bajar la inflación«.
Además, apuntan que tampoco beneficia a las rentas más bajas o vulnerables «porque ya se encuentran por debajo del mínimo de tributación» en la Renta. Por ejemplo, indican, para un trabajador que cobre el salario mínimo interprofesional, la deflactación del IRPF «no les beneficia en nada«.
De hecho, fue el mismo 15 de septiembre cuando el Congreso rechazaba la propuesta del PP de ajustar a la inflación al menos los tres primeros tramos del IRPF. No es la primera vez que la Cámara Baja rechazaba deflactar este impuesto, ya que anteriormente ya rechazó otra propuesta de Ciudadanos en la misma línea.
En esta misma línea, y viendo todavía los efectos de la inflación y del coste de vida tan alto que tenemos hoy en España, si no se toma esta medida sobre el IRPF lo que haría es que sean los propios contribuyentes los que se seguirán viendo perjudicados. El motivo no es otro que porque, a pesar de las mejoras salariales que se proponen desde el Ministerio de Trabajo, estas subidas ante el crecimiento de los precios harán que se tribute más. Todo al tiempo que estas subidas no estarán al nivel de la inflación, perdiendo así poder adquisitivo.