Xavi Hernández sabe muy bien cómo se mueven los hilos en el FC Barcelona. Por eso es que a estas alturas de su gestión, cuando está más sentenciado que nunca, reconoce que todo se puede ir por la borda. El equipo no va a tener contemplación alguna con él, porque si los resultados no llegan, lastimosamente tendrá que irse. Esa es una realidad, e incluso los mismos fanáticos empiezan a hacerle presión a Joan Laporta para que tome medidas urgentes.
8El «pobre» análisis que hace Xavi de sus pupilos
El discurso de Xavi ya no tiene valor alguno. En un principio, los hinchas le confiaban su entidad, pero ahora mismo no cuenta con el respaldo de la gente. El club que este ha lanzado a la cancha es irregular y se ahoga en sus mismos problemas. Pues, el desbarajuste que existe en la plantilla es lo que ha generado que otra vez estén fuera de Champions.
A tal efecto, el entrenador ha hablado de su gestión y dice que han competido; que ante Bayern, para ejemplificar, dieron un poco de guerra y que inclusive merecieron más. Pero el fútbol no es de merecer sino de proponer y concretar.
La misma historia de terror la vivieron con su caída ante el Inter de Milán, en donde dijeron que iban por buen camino, pero el score reflejó todo lo contrario.