De la vida de San Evaristo papa no se conoce prácticamente nada hasta que en el año 108 fue nombrado papa, salvo el hecho de que era de origen judío y de que había nacido en tierras que pertenecían a Grecia.
De acuerdo con la información que nos ha suministrado el Instituto Nacional de Estadística, en España hay alrededor de 5.700 caballeros que fueron bautizados con el nombre de Evaristo, y seguramente también habrá alguna dama que haya sido bautizada con el nombre de Evarista, así que, si conoces a alguno, que no se te vaya a olvidar felicitarlos por su onomástico el día de hoy.
San Evaristo papa
Según los datos históricos más fidedignos que se manejan, es probable que San Evaristo papa haya nacido alrededor del año 60, y no sólo se desconocen otros hechos de su vida, sino que tampoco su nombre aparece en el Canon Romano, cosa que no pasó con los que lo precedieron en el cargo de ser el vicario de Dios en la Tierra, y quizás la razón sea que se conoce muy poco de él y que su papado fue muy breve.
Los pocos datos que se tienen de San Evaristo papa han sido obtenidos del registro Liber Pontificalis, en el que consta también que fue enterrado al fallecer en la Colina Vaticana, muy cerca de la tumba de San Pedro. Son tantos los datos contradictorios con los que los historiadores se han topado sobre este papa, que en un primer tiempo se le reconoció en el Martyrologium Hieronymianum como un santo mártir.
Con posterioridad fue retirado de la lista de mártires, por desconocerse la fecha concreta de su fallecimiento y de la forma de su martirio. Lo que sí ha podido determinarse es que San Evaristo papa asumió el trono de Roma después del papa Anacleto, quien a su vez había sido el sucesor del papa Clemente, y que el nombramiento de San Evaristo papa ocurrió el 27 de julio del año 108.
Sucesión en el trono del Vaticano
Por lo menos así lo testimonian Ireneo de Lyon y de Eusebio de Cesarea, y fue el quinto papa de la Iglesia católica, pero indican que fue el sucesor de Clemente I, durante el reinado de Trajano. Se le atribuye a San Evaristo papa el haber acuñado el término de «Santa» a la Iglesia católica.
Dentro del Catálogo Liberiano aparece con el nombre de Aristo. Además, en los catálogos papales hechos en el siglo II que fueron usados por San Ireneo y San Hipólito, San Evaristo papa aparece como el cuarto sucesor de San Pedro, así que queda confirmado que fue el quinto papa. La misma lista indica que estuvo al frente de la Santa Iglesia durante un lapso de ocho años, que cubren desde fines del siglo I hasta comienzos del siglo II, esto es, entre los años 98 o 99 hasta cerca de 107 o 108.
El Liber Pontificalis indica su procedencia helénica, y que fue el hijo de un judío de Belén. Otros hechos que se le atribuyen a San Evaristo papa son el reparto de iglesias definidas como tituli a los presbíteros romanos, y la división de la ciudad en siete diaconatos o diaconías.
Pero el 26 de octubre no sólo recordamos a San Evaristo papa, sino que el Santoral Católico se completa con los nombres de otros santos y beatos que tuvieron mucha importancia para el mundo cristiano, entre los cuales se encuentran:
San Amando de Argentorato, San Aptonio de Anguleme, San Beano de Mortlach, San Ceda de Lastingham, San Eata de Hexham, San Felicisimo de Cartago, San Fulco de Pavía, Santa Gibitruda vírgen, San Luciano de Bitinia, San Marciano de Nicomedia, San Rogaciano de Cartago, San Rústico de Narbona, San Sigebaldo de Metz, San Witta de Bürberg, Beato Buenaventura de Potenza y Beato Damián Furcheri.