El merengue es una de las preparaciones más clásicas de la pastelería y es perfecto para decorar tanto un lemon pie como una deliciosa tarta tres leches. Esta crema dulce, blanca y a la cual puedes colorear de los colores que desees y además saborizar con el saborizante que prefieras, es versátil, deliciosa y te permite cambiar completamente el aspecto de tu postre favorito.
Ahora bien, aunque se trata de una preparación muy tradicional y básica de la pastelería, preparar un merengue perfecto tiene algunos pasos que se deben seguir para garantizar que quede calidad, pues en la pastelería, con un pequeño error de cálculo y añadir un poco más o un poco menos de determinados ingredientes, puede marcar la diferencia. Además de las cantidades, también hay que tener en cuenta otros aspectos que son definitivos para que puedas tener el merengue perfecto, acompáñame a conocerlos.
6Utiliza un recipiente perfectamente limpio
Para que las claras de huevo puedan montar perfectamente, es necesario que estás las viertas en un recipiente completamente limpio y seco, ya que si la el recipiente se encuentra con algo de grasa, humedad o suciedad, las claras no van a poder montar.
Toma el bol que vayas a utilizar, lávalo perfectamente y con la ayuda de un papel absorbente sécalo sin dejar ningún rastro de humedad. Si lo deseas, utiliza medio limón y pásalo por el bol, sécalo y así el limón contribuirá a eliminar cualquier rastro de grasa que pueda haber en su interior.