La parálisis cerebral es un grupo de trastornos que afecta al movimiento normal del cuerpo, a que el desarrollo se haga bajo su ritmo habitual. Sin que se trate de una sola enfermedad, nos encontramos ante una variedad de síndromes que producen una lesión permanente y dificultan la vida individual.
Afectando a la capacidad de la persona para controlar sus músculos, sucede una sola vez en el tiempo y no se suele repetir. Esto, que no quiere decir que sea algo positivo, permite que el estudio que se hace sobre su tratamiento sea mucho más exacto, eficaz y concreto desde el primer diagnóstico.
¿Cuáles son los tipos de parálisis cerebral?
Vivir con la parálisis cerebral infantil puede ser muy distinto según la persona que tengamos delante y es que, gracias a los estudios que se han hecho a lo largo del tiempo, podemos ver qué tratamiento se deriva para cada uno de los casos y cuáles son las posibles soluciones que se nos ofrecen.
El trastorno, que además de afectar al movimiento o la postura también puede causar daños en la visión, el lenguaje o la inteligencia, se debe llevar con mucho cuidado, tratando siempre al paciente con la mayor delicadeza posible. A continuación, para que sepas mucho más, te dejamos con algunas de las derivadas comunes:
De tono muscular
La parálisis cerebral espástica es la más frecuente cuando hablamos del tono muscular infantil con el que se nace. Afectando a casi un 80% de los niños a los que diagnostican la PCI, nos encontramos con una falsa movilidad que se puede ir deteriorando con el tiempo si no ponemos el remedio adecuado.
De extensión del la lesión
La manifestación de este modelo se hace visible en función de lo grande que es la lesión una vez que se ha diagnosticado. Monoparesia, hemipléjica espástica o tetrapléjica cuando ha llegado hasta las cuatro extremidades son algunas de las más reconocidas y sobre las que se han hecho ya diversos estudios a través.
En cuanto a la gravedad
La intensidad con la que se dan los síntomas provocados por la parálisis también la diferencian del resto de ejemplos que se pueden dar. No a todas las personas les llega con igual volumen y esto es un detalle que también debemos valorar de cara al tratamiento que se ponga al enfermo.
Los avances han permitido que el seguimiento de este trastorno se haga con mucha más precisión, con todos esos detalles con los que se puede dar una vida mejor al paciente que la sufre desde una edad temprana. Así, las aplicaciones móviles para parálisis cerebral se han convertido en el perfecto aliado para todos los afectados.
Apostando por una salud que respete a todos por igual, cualquier avance que se haga en PCI podría ser el que verdaderamente ayude a las personas que sufren de este conjunto de afecciones tan delicadas. Hoy, con muchos estudios a su favor, resulta mucho más sencillo de llevar que hace solo unos años aunque todavía queda bastante por hacer.