Y es que la cinta de correr que se utilizan actualmente en casi todos los gimnasios y hogares del mundo tiene un origen especialmente torturador.
La cinta de correr que conocemos hoy día ya se utilizaba en la época de los romanos en el siglo I DC como una grúa con ruedas que utilizaba a dos personas para levantar pesos. Sé que después de la caída del imperio romano, fue utilizada en la edad media en toda Europa en la construcción de las catedrales y castillos. Hasta llegar al año 1818 cuando el ingeniero William Cubitt la presento como un instrumento de tortura para los presos, ¿la excusa? Aprovechar la potencia muscular y curar la inactividad.
Si eres de los que odia correr en la cinta, te explicamos a continuación la razón, y tal vez después de entender te den ganas de volver a usarla.
4En el año 1999 los escritorios para correr se hacen populares
El modelo fue propuesto por el doctor James Levine como una alternativa para combatir la ociosidad y los problemas de salud asociados a la gran cantidad de horas que se pasan las personas sentadas en las oficinas. Para evitar estos problemas de salud, las personas pueden utilizar el escritorio como cinta de correr y caminar lentamente mientras trabajas durante todo el día.