Y es que la cinta de correr que se utilizan actualmente en casi todos los gimnasios y hogares del mundo tiene un origen especialmente torturador.
La cinta de correr que conocemos hoy día ya se utilizaba en la época de los romanos en el siglo I DC como una grúa con ruedas que utilizaba a dos personas para levantar pesos. Sé que después de la caída del imperio romano, fue utilizada en la edad media en toda Europa en la construcción de las catedrales y castillos. Hasta llegar al año 1818 cuando el ingeniero William Cubitt la presento como un instrumento de tortura para los presos, ¿la excusa? Aprovechar la potencia muscular y curar la inactividad.
Si eres de los que odia correr en la cinta, te explicamos a continuación la razón, y tal vez después de entender te den ganas de volver a usarla.
3¿Sabías que en el año 1994 se patentaron las cintas de correr resistentes al agua?
Así es! Fue patentada con el objetivo de proporcionar una experiencia diferente a los deportistas, ya que le permiten caminar, correr, pedalear hacia atrás, arrastrar los pies y hacer movimientos polimétricos y es ampliamente utilizada en la medicina deportiva.