Malinterpretar el comportamiento de los gatos puede generar dificultades en la convivencia diaria. Por lo general, cuando esto sucede el problema no es por la falta de afecto, sino por la imposibilidad de entender qué es lo que estos animales de compañía sienten y necesitan.
Según los profesionales de la academia online antrozoologia.com, especializada en vínculos entre humanos y otros animales, existen distintas maneras de construir relaciones sólidas y duraderas con los gatos. Estas conductas, que es posible adoptar en familias multiespecie, tienen sustento científico y sirven para lograr una convivencia armoniosa.
Comprender la psicología del gato fomenta la buena convivencia
Según un estudio llevado adelante en conjunto por psicólogos de las universidades inglesas de Sussex y Portsmouth, hay algunos aspectos esenciales que es conveniente considerar a la hora de establecer un vínculo con un gato. En primer lugar, estos animales atraen y solicitan la atención humana mediante “ronroneos de solicitud”. Además, está comprobado que los gatos pueden diferenciar su nombre de otras palabras.
A su vez, son sensibles a las emociones humanas, por lo que si un tutor se siente triste es probable que froten o den cabezazos contra él. Ahora bien, estos científicos han publicado un artículo en la revista Nature Scientific Reports en el que han identificado una técnica para poder ayudar a construir un vínculo saludable con un gato. Esta técnica se basa en el parpadeo de los ojos.
En este sentido, cuando los humanos entrecierran sus ojos mirando al gato generan una especie de sonrisa y bienestar en el animal. Además, cuando este gesto es bien recibido por el animal, es más probable que parpadeen lentamente a sus tutores y que se acerquen cuando se les extiende una mano. Practicar esta técnica y estar atento al comportamiento del gato es una manera sencilla de iniciar un vínculo más sólido y saludable dentro de una familia multiespecie.
Conductas que pueden resultar molestas para un gato
Por otra parte, los especialistas de Antrozoologia.com destacan que hay otras características que es importante considerar a la hora de relacionarse con gatos. Por ejemplo, muchos de estos animales experimentan molestias cuando alguien les acaricia la barriga, ya que se trata de una zona muy sensible del cuerpo.
Además, es común que los gatos sientan rechazo a los abrazos porque, de esta manera, se les bloquea la posibilidad de escapar, sintiéndose atrapados. Entonces, para establecer un buen vínculo, siempre es mejor comenzar por el parpadeo de ojos. Otra conducta que genera conflictos con los humanos es el hábito de los gatos de arañar, que por lo general los gatos practican sobre muebles de la casa. Es importante saber que no es posible entrenarlos para que no lo hagan, pero sí es factible educarlos para que descarguen este impulso en sus rascadores, en lugar de en los muebles.
Con el apoyo de especialistas como los de Antrozoologia.com, es posible desarrollar una mejor comprensión del comportamiento de los gatos y así tejer vínculos positivos y saludables con ellos.