La tortilla de patatas rellena de queso es toda una delicia al paladar, pues combina de manera majestuosa todo el sabor de este platillo tradicional con una cremosidad espectacular que se encuentra justo en medio y que combina lo jugoso con un sabor irresistible.
Hacerla perfecta y lograr que no se desmonte aun cuando está rellena, es en realidad muy fácil de lograr y solo debes seguir un paso a paso muy sencillo y poner en práctica un truco muy fácil que podrás aplicar incluso a otros rellenos.
4Comienza trabajando las patatas
Para la preparación de este plato de sabor tradicional, lo primero que debes hacer es lavar bien las patatas, pelarlas y cortarlas en rebanadas no muy gruesas. Una vez que las tengas preparadas es momento de eliminar el exceso de almidón.
Eliminar el exceso de almidón de las patatas es un procedimiento sumamente sencillo; simplemente, toma las rebanadas de patatas y ponlas en un recipiente. Cúbrelas con agua fría y déjalas durante 10 minutos. Transcurrido este tiempo, retirarlas y escúrrelas muy bien.