La asociación española Hazte Oír quiere condicionar la formación de Macarena Olona antes siquiera de que se hable de la propia financiación. Desde la asociación católica quieren presionar a Olona para que les tenga en cuenta porque entienden que Vox ha abandonado algunas de sus polémicas. Este divorcio entre Hazte Oír y Santiago Abascal ha convertido a Macarena Olona en la nueva esperanza de la derecha católica.
Pese a que aún no se ha aclarado siquiera si Olona se lanzará a montar un partido político, pues aún sigue con las rondas de contactos para ver qué posibilidades hay, lo cierto es que ya los defenestrados por Vox ya esperan con ansias el anuncio. Aún así, Olona sigue yendo paso a paso y no ha tomado una decisión firme. Pero para Hazte Oír es fundamental ejercer presión.
La idea de Hazte Oír, quienes tienen mejor información sobre los pasos de Macarena Olona de los que la propia parlamentaria se cree, es la de condicionar a nivel ideológico el partido que forme, pero no parece que los pasos que da la excandidata a Andalucía vayan en el mismo sentido que los de la asociación de ultra católica. De momento, los contactos de Olona se centran en buscar financiación a través de reconocidos personajes, algunos de ellos muy conocidos en una etapa concreta, pero no ha pasado de ahí. No tiene claro los nombres de quienes montarán el partido.
Tampoco de quienes pondrán el dinero y mucho menos de si es conveniente presentarse a las elecciones. Haría falta hasta algún sondeo interno que tanteara qué posibilidades reales tiene Olona a nivel político. Pero mientras tanto, la asociación ultra católica no se ha cortado para presionar a la exdiputada.
En Hazte Oír acabaron mal con Santiago Abascal. El diputado y presidente de Vox no dio pábulo a algunas de sus peleas y esto sentó muy mal en el seno de la formación. El problema es que Olona sabe que la disputa del electorado se ubicará más en el centro que en la derecha.
Y es ahí donde la parlamentaria cree que puede reeditar un partido liberal que se haga con algunos de los votos del Partido Popular y de Vox, por no hablar de alguno que esté inmovilizado. Es por esto que la asociación quiere ofrecer su apoyo antes de tiempo a cambio de tener voz y voto en el programa y en la orientación que siga la formación que monte Olona. Eso siempre que la haga, claro.
El lobby ultra católico pretende que Macarena Olona repesque y haga bandera de ideas como el aborto, algo que Vox toca con conciencia, pero que no pelea de una forma tan visceral como la propuesta de Hazte Oír. Este es solo un ejemplo de lo que pretende la asociación con Olona, pero saben que sin ella no tendrían ninguna posibilidad de llegar a influenciar a nivel político.
Desde luego, si Olona se presenta a las elecciones lo hará a las nacionales, no a las autonómicas ni a las municipales. El problema es que los mimbres con los que trabaja la parlamentaria para su partido no son precisamente los mismos con los que trabaja Vox (y mucho menos Hazte Oír), sino que los propios que financiarían el partido de Olona buscan un partido puramente liberal y desprovisto de otras cuestiones. De hecho, el plan es reeditar un Ciudadanos 2.0 más contundente con algunas cuestiones como la inmigración.
La presión de Hazte Oír de momento se centra en lanzar alguna que otra encuesta para que sus seguidores e integrantes digan en masa a Olona el partido que querrían. Buscan encuentros con ella y buscan formar parte de la formación antes siquiera de que haya cogido forma. Pero lo cierto es que desde el entorno de Olona deslizan que la diputada no tiene ninguna intención de condicionar ideológicamente su partido metiendo a Hazte Oír en su equipo. Y mucho menos ponerle al mando del programa electoral.