Si el FC Barcelona y la misma afición tenían sentenciado a Gerard Piqué ahora lo es más, porque el jugador ha mostrado otra vez su peor cara, y el equipo tiene pagar las consecuencias. Un defensor flojo y sin visión de juego ha afectado enormemente a la plantilla que patinó en el partido ante el Inter de Milán, como parte de la cuarta fecha de la fase de grupos de la UEFA Champions League. Un Barça prácticamente eliminado y condenado al fantasma de Europa League.
6Una jugada que ha repudiado la afición
Obviamente, en el banquillo se les atañe esta pifia a todos por igual. Pero desde afuera, como espectadores, vemos que Piqué fue uno de los que peor jugó. Tras su fallo el equipo se vino abajo.
Es el que lleva más palo porque últimamente no ha jugado nada bien. Y ahora viene a meter la pata hasta el fondo en un duelo que era de vida o muerte.
Desde luego, le están lloviendo más críticas que nunca. Y de ser un héroe desde hace años, ahora es uno de los villanos el cual no está dejando ganar al conjunto azulgrana.