Probablemente la manera más popular de cocinar el pulpo sea haciéndolo a la gallega, o de alguna forma similar. Y hay que reconocer que así está delicioso. No obstante, no se puede decir que el pulpo sea un ingrediente lo que se dice barato, y hay veces que se puede cocinar de otras formas para que cunda más, sin renunciar a otro plato delicioso, que abarque para toda la familia. Es el caso de las patatas con pulpo, un guiso mucho más económico, generoso y que seguro que sienta de maravilla en pleno otoño.
Si quieres saber cómo prepararlo de la manera más sencilla y tradicional, no pierdas detalle.
5El momento del pulpo
Ya estaría casi todo el plato listo, sencillo, ¿verdad? El pulpo, ya cocido, es lo último en añadirse. Cuando el líquido formado por el caldo y el vino se haya reducido bastante y las patatas estén blanditas, se le añade el pulpo contado en trozo; es decir, en rodajas, igual que si se hiciese a la gallega o algo parecido.
Se deja un poco más el resultado en el fuego, esperando simplemente a que el caldo se termine de reducir o no, eso ya varía en función de si uno prefiere la comida más o menos caldosa.