Los pimientos rellenos son una excelente opción para servir como plato principal con un relleno contundente e incluso como una guarnición diferente. Las opciones que tienes para rellenarlo son infinitas y gracias a las propiedades de esta verdura, resulta en una magnífica opción nutricional.
Si los quieres preparar divinos, jugosos y con un exterior implacable, hay ciertas cosas que tienes que saber. Acompáñame a descubrir todo lo que es necesario saber para qué resulten simplemente perfectos.
1Unas frutas diferentes que son simplemente deliciosas
Si bien, los pimientos son los acompañantes perfectos de platos salados, guisos, arroces y carnes, lo cierto es que, tal como sucede con los aguacates, tomates y calabazas, estas deliciosas hortalizas son definidas desde el punto botánico como frutas.
Sin embargo, gracias a su sabor y características propias, así como a su forma de aprovechamiento en la cocina, son tratados como hortalizas o verduras. Ahora bien, si en algo coinciden todos ellos, es en lo nutritivos que resultan y en las notables propiedades saludables que de ellos se pueden aprovechar.
Los pimientos son una importante fuente de vitaminas; sobre todo de vitamina C; siendo los rojos los que más ricos son en esta. Además de vitamina C, tanto los rojos, verdes, como los amarillos, resultan ricos en vitamina A; por lo tanto, contribuyen a una adecuada absorción del hierro, mejoran la salud ocular y gracias a su poder antioxidante, refuerzan el sistema inmune.
¿Sabías que los pimientos contienen tres veces más vitamina C que las naranjas?