El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, defendió este domingo una vez más la Superliga como la mejor solución ante un «fútbol europeo enfermo» y que debe ser potencial «como deporte global para proteger a todos los clubes», mostrándose esperanzado de que la justicia europea pueda darles la razón para un proyecto que no es «cerrado» y que propone que el «25 por ciento» de sus plazas sean «abiertas».
«Para resolver un problema, hay que empezar necesariamente por reconocerlo, sólo así podremos buscar soluciones. El grave problema es que el fútbol está enfermo en la vieja Europa, la UE y España, está perdiendo su liderazgo como los parámetros y los datos confirman», advirtió Florentino Pérez durante las Asambleas Ordinaria y Extraordinario del club.
El dirigente insistió en que «los jóvenes se interesan menos» por el fútbol y que «las competiciones europeas actuales tal y como están diseñadas no atraen al aficionado» salvo en los cruces finales. «Con el máximo respeto a las ligas nacionales, entendemos que deben cambiar para ofrecer partidos durante todo el año de máximo nivel y que los equipos más potentes compitan entre sí para situar a nuestro deporte en su lugar privilegiado», añadió.
Pérez recordó que «así están organizados la mayoría de los deportes con los mejores compitiendo entre sí» y que es un modelo que triunfa en los Estados Unidos. «El Real Madrid ha caído a la posición 13 del ranking Forbes de mejores equipos, superado por 12 americanos de diversos deportes, algo deben estar haciendo muy bien en Estados Unidos y algo muy mal en la vieja Europa», advirtió.
El mandatario madridista citó un «dato difícil de entender y representativo» para afianzar sus argumentos. «Si sumamos los ingresos de TV de la Champions, la Liga Europa y de las cinco grandes ligas, por primera vez se vez superados por los de la NFL, que se juega entre septiembre y febrero», detalló.
«No valen las excusas, antes el fútbol lideraba y ahora está ampliamente superado por el deporte de los Estados Unidos. Los datos no admiten discusión, estamos perdiendo la batalla global del entretenimiento, y eso que el fútbol es el único deporte global y que no estamos sabiendo aprovechar esa ventaja», prosiguió Florentino Pérez.
«Nadal y Federer han jugado en 40 ocasiones, Nadal y Djokovic en 59, ¿acaso esto es aburrido? Esto ha impulsado al tenis y a todos los jugadores porque el tenis sale reforzado. Contra el Liverpool, en 67 años, sólo hemos jugado nueve veces, contra el Chelsea, cuatro. ¿Qué sentido tiene de privar a los aficionados de todo el mundo de estos partidos? Sólo potenciando el fútbol como deporte global podremos proteger a todos los clubes y para ello es imprescindible ofrecer partidos de máxima calidad e interés», subrayó.
Pérez recalcó que la UEFA «impulsa reformas de la Copa de Europa en la dirección opuesta, aumentando los partidos intrascendentes» y que esto «sólo sirve para alejar más a los aficionados y acelerar la decadencia del fútbol europeo». «Necesitamos una gestión profesional, moderna y transparente, y no trabajar en viejas estructuras basadas en el pasado para ofrecer un producto de calidad que devuelve la pasión por el fútbol», afirmó.
UNA SUPERLIGA CON UN FORMATO ADAPTABLE A LO QUE SE CONSIDERE
Además, explicó que «algunos» han querido «desviar la atención» sobre el proyecto de la Superliga para que «no se debata sobre la decadencia cuando la mayoría de los clubes sufre cada daño para cuadrar sus cuentas». «No quieren que se debata sobre formatos y los abusos en el ‘fair play’ de determinados clubes que todo conocemos, sin que tengan consecuencias», aseveró.
Sobre el formato del proyecto, donde se sustentas las principales «críticas porque dicen que no se tiene en cuenta el mérito deportivo», puntualizo que la propuesta es «un potencial formato con el 25 por ciento de las plazas abiertas». «La Superliga no es cerrada, acordamos que la adaptaríamos a lo que se considere más oportuno», aclaró Pérez, que lamentó «las amenazas e insultos» por parte de la UEFA.
Por ello, apostó por «un diálogo constructivo y libre que aborde estos graves problemas» y se mostró esperanzado sobre el proceso judicial abierto en la justicia europea sobre el «monopolio de la UEFA», que espera que resuelva «definitivamente en una decisión que marcará el futuro del deporte en la UE».
«Una vez que se pronuncie, trabajaremos juntos para ilusionar durante todo el año al aficionado y todo debe ser fruto de un debate sin presiones, y para ello los clubes deben ser libres de su destino y siempre en arreglo a las leyes europeas», sentenció.
PLANTILLA PARA SEGUIR «ILUSIONANDO»
En líneas generales fue un encuentro mucho más ‘cómodo’ de lo habitual de Florentino Pérez con sus Socios Representantes, que ni siquiera en su turno de intervenciones le preguntaron por otros temas como los no fichajes de Kylian Mbappé o Erling Halaand, o la marcha de Pablo Laso.
El mandatario expresó su «agradecimiento» a los presentes por su «cariño y apoyo para trabajar por el presente y el futuro» del Real Madrid y les recordó que la «unión» es la que les ha permitido llegar a «120 años de historia» convencidos de que pueden seguir siendo «líderes en lo deportivo, económico y social».
Pérez cree que la pasada temporada fue «histórica más allá de los triunfos y las gestas deportivas», principalmente porque pudieron volver al Santiago Bernabéu y «compartir» su «pasión por el Real Madrid», aunque resaltó que la pandemia sigue provocando «estragos terribles en el fútbol» pese a que han ido «poco a poco» superándola.
«Lo que se ha vivido nunca se podrá olvidar, nuestro estadio es mágico y contamos con jugadores que además de ser los mejores en sus puestos son madridistas, y esa mezcla genera un ambiente que prácticamente nos hace imbatibles», prosiguió, celebrando que las remontadas vividas formen parte ya de «de la memoria colectiva del madridismo».
El presidente del Real Madrid calificó de «leyenda» del club y del «fútbol mundial» a gran parte de su plantilla actual y deseó que Karim Benzema consiga un Balón de Oro del que «nadie duda». En ese punto, dio las gracias a Marcelo, Casemiro, Bale e Isco, con el primero recibiendo la ovación más sonora.
«Tenemos una plantilla para seguir ilusionando y que sigue teniendo hambre de triunfos y que sabe que el nivel de exigencia del Real Madrid no permite relajación ni autocomplacencia», subrayó el dirigente madridista.
Por otro lado, consideró que «los números demuestran» que la cantera del club «es la mejor del mundo» y alabó a una sección femenina de las que ya están «orgullosos de que en tan poco tiempo se haya consolidado como uno de los grandes referentes nacional e internacional».
Sobre el baloncesto, Florentino Pérez insistió en que les está haciendo «disfrutar de uno de los ciclos ganadores más importantes» de la historia y elogió su carácter tras una «temporada muy difícil» que «demuestra la genética competitiva de este equipo que tampoco se cansa de ganar».
Ahí vino otra ovación de los socios cuando hizo una «mención muy especial» para Pablo Laso, «líder de este equipo ganador». «Sólo tengo palabras de cariño, admiración, reconocimiento y gratitud para una leyenda del Real Madrid y del baloncesto europeo, esta es y será siempre su casa, su etapa será recordada eternamente, es uno de nuestros grandes», remarcó sobre el técnico vitoriano.
Finalmente, Pérez tuvo un recuerdo para todos aquellos que les han dejado en este 2022 como, entre otros, Paco Gento, Pedro Ferrándiz, Manolo Santana, Javier Marías, Javier Imbroda, Freddy Rincón o José Luis Pérez Payá.