¿Alguna vez te has detenido a pensar que el pijama es la única prenda de ropa con la que puedes pasar entre 6 y 8 horas todos días y a veces incluso sin ropa interior? Pues sí, el pijama puede convertirse en un caldo de cultivo para bacterias y gérmenes que pueden causarnos infecciones.
Con frecuencia pasamos el día en casa, sobre todo los fines de semana, después de una larga semana de trabajo, tirados en el sofá o en la cama y no nos quitamos el pijama, pues esto es un error que podría estar afectando nuestra salud, ya que estamos incrementando el tiempo de contacto del pijama con objetos y superficies contaminadas con microbios o patógenos que llevamos a la cama.
Además, hay que recordar que de manera natural, nuestra piel constantemente se encuentra en proceso de renovación, sobre todo durante la noche, dejando tanto en la ropa de cama como en el pijama cientos de células epiteliales, cabellos, bacterias, hongos y microbios que en caso de no ser removidos se van acumulando, pudiendo llegar a generar malos olores e infecciones.
A continuación te contamos los riesgos a los que te expones por no lavar el pijama con frecuencia.
1El pijama y las infecciones
El cuerpo humano puede llegar a desprender cientos de células muertas de la piel en cuestión de minutos que se quedan impregnadas en el pijama. Si le sumas a estos números los millones de microbios que se acumulan en el pijama, es normal que se produzcan infecciones e irritaciones, sobre todo en la piel, así lo ha señalado Guillermo Quindos, Microbiólogo y Director del Departamento de Inmunología, Microbiología y Parasitología de la Facultad de Medicina y Enfermería de la Universidad del País Vasco.
