Una tarea más complicada de lo que parece es vender online.
Es cierto que la tecnología evoluciona, facilitando herramientas para que los comercios no se queden atrás y se adapten a este mundo digital. Pero no es fácil seguir el ritmo.
Todo avanza muy rápido y muchos negocios descartan adentrarse más en este mundo, o bien se quedan atrás por falta de recursos. Al final, la tarta de la venta online es para unos pocos, y esto no debería ser así.
Vender por internet debería ser más fácil.
¿Cómo devolver el poder al pequeño negocio?
¿Y si hubiera una manera de vender online y enviar con un click solo conociendo el número de teléfono o email del cliente?
Esta es la pregunta que se hicieron en adresles.com, una plataforma que está revolucionando la logística y la venta online tal y como se conoce.
Tan sencillo es su uso, que desde diferentes asociaciones de microempresas y círculos empresariales la recomiendan internamente.
Vender por redes sociales, ya sea WhatsApp, un chat de Instagram o un mensaje de Facebook, es realmente sencillo mediante adresles.
Su versatilidad y casos de uso para pequeños y grandes comercios está replanteando la manera de comprar por internet y abriendo nuevos canales de venta de forma sencilla.
El funcionamiento de adresles
En primer lugar, cabe destacar que la app de adresles es totalmente gratuita, y registrarse lleva un minuto.
Una vez dado de alta como comercio o usuario, se habilita la opción de enviar algo, o enviar y cobrar. La tienda solo tiene que insertar el teléfono del destinatario, a quien le llega un mensaje donde ve el precio asociado del producto y del envío. Si está de acuerdo, lo acepta y se efectúa la transacción. Un mensajero recogerá el producto donde se haya marcado el comercio y lo enviará donde lo haya indicado la otra persona. Sin ir a correos.
La versatilidad de los casos de uso ha llevado a miles de personas y empresas a utilizarlo para su propio interés, abriendo nuevos canales de venta, permitiendo servicios premium o facilitando devoluciones, a la par que protege la privacidad del cliente.
Mario Iñiguez, CEO de la empresa, explica su funcionamiento: «Adresles es un servicio que facilita la logística a los usuarios de a pie y las empresas. En un principio, fue concebido como una manera fácil de enviar de un punto a otro mediante un número de teléfono. Pero las empresas nos pidieron la solución completa para vender online y poder cobrar y enviar, y la hemos desarrollado para poder ayudarles».
Algunos de los problemas con los que se encuentran los negocios son la falta de web, o la falta de conocimientos para mantenerla; en algunos casos, la tienen, pero no pueden competir contra grandes marcas. Algunas empresas no ofrecen en su web venta online, sino que solo es un escaparate.
Por otro lado, mantenerla puede suponer varias dificultades; lleva mucho tiempo gestionar la tienda online, además del coste económico de desarrollarla y mantenerla, sumado a los problemas constantes de actualizaciones y programación.
La logística de envíos puede ser ineficaz, así que se debe acudir a servicios logísticos para enviar los paquetes, además de imprimir etiquetas para los envíos. A todo esto se le añade que, en el caso de los negocios pequeños, los costes de envío son elevados por no tener un gran volumen.
Finalmente, pueden darse otros contratiempos como errores en direcciones, problemas con las devoluciones o problemas de privacidad y seguridad en los pagos.
Todos estos problemas, con adresles quedan resueltos de manera eficaz.
Compra y envío con adresles, algunos ejemplos
«María vende artículos de ropa por internet y tiene un Instagram donde la enseña, aparte de su tienda. Creó una web, sin demasiado éxito. Le costó mucho dinero, y eso que estaba empezando. Tenía que actualizarla, depender de un programador y un diseñador… Todo resultaba muy difícil. Problemas y más problemas.
Su padre, que también tiene una tienda, se maneja algo con el teléfono y tiene clientes aquí y allá con los que habla por WhatsApp. Rudimentario, pero le funciona. Sin embargo, cerrar ventas por ahí es latoso…»
Estos son claros ejemplos de la realidad de los comercios locales que tienen un buen producto, pero donde la tecnología no es un aliado.
Mediante adresles, tanto María como su padre pueden utilizar Instagram y WhatsApp para hacer esa venta imposible en su web. Con solo el teléfono, envía y cobran el producto. Un producto que los clientes ya han podido ver en la tienda o Instagram, o incluso en la web. Ese es su escaparate.
«Me ha cambiado la vida. Ni web, ni nada. Mis clientes conocen que tengo buen producto y me llaman, o lo ven a través de las redes sociales, donde sí me manejo, y por chat cierro la venta con solo su número de teléfono. Cuando yo quiera, viene un mensajero a recogerlo aquí y decido quién paga el envío en función de lo que compre. Vaya, como volver al mercado, pero con nuevas tecnologías.»
Se puede consultar más información sobre esta aplicación en la página web de adresles.