Situada en la cultural y emblemática Alcalá de Henares (Madrid), con la inestimable ayuda de su Ayuntamiento y perseverancia o más bien tozudez de un grupo de fanáticos de las motocicletas, la antigua fábrica de jabones GAL se transforma de viernes a domingo en la sede del Museo permanente ‘Made in Spain’, una exposición de motocicletas que consigue recorrer la historia de la industria española durante el siglo XX, con más de 300 motos de esa época.
La muestra permanecerá abierta todos los fines de semana y cuenta con sala previa de proyecciones, sala principal con escaparates y paneles explicativos donde los asistentes pueden admirar las motos expuestas y por último la zona de competición. La mayoría de estas motos han sido trasladadas desde las instalaciones de dos grandes colecciones: la perteneciente a los hermanos Lozano (Luis y Rafael) y la de Ignacio Medina (Medinabi), para ello se ha contado con la colaboración y servicios de la empresa RapidMotos, especializada en el transporte de motos sin embalaje y todo ello, por supuesto, bajo la supervisión, en otros, de Juan José Blanco (Director del Museo) y Fernando de Portugal (Last Lap).
La primera exposición de motos españolas en Madrid
‘Motos Made in Spain’ es la primera muestra española de motos que busca dar a conocer la historia de este medio de transporte en el país, a través de más de 300 modelos de marcas tan conocidas como Bultaco, OSSA, Puch y Derbi, entre otras. De esta manera, es posible recorrer desde las primeras motos creadas por un grupo de autodidactas innovadores y visionarios, pasando por la España de la posguerra. Fue en esta época cuando distintas marcas nacionales pudieron recuperar parte de la industria española.
RapidMotos recomienda a todos los usuarios y aficionados a visitar esta exposición cada viernes de 16 a 20 horas y sábados y domingos de 10 a 14 y de 16 a 20 horas para hacer un repaso por la historia de la industria del motociclismo o simplemente disfrutar de una cantidad ingente de motos clásicas, volver la vista atrás y permitir que la nostalgia envuelva el ambiente durante unas horas.