Recetas de albóndigas hay muchísimas, pero como las albóndigas suecas ninguna; o al menos eso suelen decir quienes las han probado alguna vez. Estas se caracterizan por ser de sabor muy potente y tener una cremosidad al morder que las convierte en todo un acierto a la hora de comer.
Gracias a que tienen una importante cantidad de especias, las albóndigas suecas se caracterizan por ser aromáticas y combinar de manera magnífica con guarniciones sencillas y da sabor neutro e incluso algo dulce. Si quieres deleitar a todos con una receta diferente y un sabor exquisito, quédate a conocer cómo prepararlas.
6La velouté, la salsa de estas albóndigas suecas
Limpia la sartén con una espumadera para retirar cualquier partícula de suciedad y utiliza la misma para comenzar a preparar la salsa. Tal como te he comentado, la salsa de estas albóndigas es muy diferente a la utilizada con las tradicionales, ya que consiste más en una especie de velouté.
La velouté se prepara con un roux básico, igual al que utilizas tradicionalmente para hacer la salsa bechamel. Sin embargo, la diferencia principal entre la bechamel y esta salsa, es que la misma se liga con caldo en lugar de leche, y su consistencia resulta más ligera.