La fachada SATE es una de las mejores soluciones para aislar la vivienda en la actualidad, ya que presenta muchas ventajas sobre otro tipo de sistemas, y de ahí que sea una de las primeras elecciones de los profesionales.
Sin embargo, también tiene algunas desventajas que hay que conocer con el fin de tomar la mejor decisión. Una vez aclarados los pros y los contras podremos decidir si es el adecuado en nuestro caso, o debemos optar por otra manera de aislar la vivienda.
¿Qué ventajas nos aporta el sistema SATE?
Existen una serie de ventajas que son las que hacen que cuando se quiere mejorar el aislamiento de un edificio se piense de inmediato en esta técnica.
Nos olvidamos de las condensaciones y de las filtraciones de agua
Al poner una capa de material sobre la fachada, el interior de la vivienda está más caliente y desaparece la humedad por condensación, y lo mismo pasa con las filtraciones de agua, las cuales ya no encuentran grietas por dónde colarse.
Mejora la eficiencia energética
Quizá la principal ventaja del sistema SATE es esta, la mejora de la eficiencia energética en unas cifras que van del 40 al 70 %, haciendo lo propio con la inercia térmica del edificio, lo que significa un mayor confort térmico al mantener la temperatura más tiempo y sin variaciones.
Aísla contra el ruido
Siempre se piensa en este aislamiento cuando queremos mejorar la eficiencia térmica, pero también consigue lo mismo con el ruido, atenuando el que nos llega de la calle y haciendo que la vivienda sea más confortable.
¿Y sus desventajas?
Por supuesto, también hay desventajas, puesto que ningún aislante es perfecto y cada uno de ellos presenta algunos inconvenientes.
No resiste bien los impactos
Las fachadas siempre están expuestas a los golpes, arañazos, los balonazos de un niño, y en algunas localidades, incluso a que un coche aparcando las golpee.
El material exterior de la fachada SATE no es el más resistente a los golpes, de manera que si recibe uno fuerte es posible que tengamos que llamar a los especialistas con el fin de que subsanen el desperfecto.
Hay que arreglarla si necesitamos hacer una instalación sobre la fachada
Es común que la bajante de un canalón se rompa con el tiempo o que queramos poner una máquina más de aire acondicionado, cambiar la que teníamos o que incluso nos claven los cables de la fibra óptica o de la luz.
Cualquiera de estas intervenciones provoca desperfectos que nos obligan a llamar a un profesional para que los arregle, unas reparaciones que son complejas y no puede hacer cualquiera.
Se tarda bastante a la hora de instalarla
A la hora de instalar este sistema, las prisas no son buenas consejeras y de hecho se necesitan varias intervenciones para que quede instalado correctamente, lo cual hace que el precio sea elevado por la mano de obra que hay que emplear.
De todas maneras, este tipo de aislamiento es una buena inversión debido no solo al ahorro de energía que vamos a obtener desde el primer momento, sino también a los demás beneficios que obtendremos.