Tras dos años de espera los festivales españoles pudieron volver en todo su esplendor este 2022. Un regreso que espacios como el MadCool, el Primavera de Barcelona y el BBK de Bilbao presumieron de números récords, y donde nacieron espacios nuevos como el Cala Mijas de Malaga. Sin embargo la crisis actual y el anuncio cada vez más acelerado de nuevos conciertos y festivales para 2023 bien puede crear problemas a futuro.
Solo en la ciudad de Madrid dos mega festivales como el Madcool y el Primavera tendrán que competir en fechas cercanas, y además la capital sigue sumando ofertas. El Dcode, el Madcool Sunset que volverá el año que viene, Tomavistas y las Noches del Botánico son algunos de los nombres que competirán tanto por el público como por los artistas que vengan a presentarse al país.
Es un temor que se ha repetido desde que empezó el año, pero el embudo de conciertos apunta a ser mucho más preocupante para el próximo año, cuando con toda seguridad los españoles tendran menos margen de gastos.
MÁS OFERTA PARA UNA DEMANDA MENOR
Lo cierto es que todo indica que la demanda por ir a eventos en vivo en 2023 será mucho menor que este año. La fiebre por recuperar la música en vivo tras su ausencia en 2020 y su versión muy reducida en 2021, y el repunte económico de este año hicieron que los conciertos tuvieran una bonanza importante. Pero el retorno ya completo, y la evidente recesión, pueden hacer mella en está recuperación.
Sin embargo, y a pesar de excepciones como el caso de Coldplay en Barcelona, ya empiezan a verse algunas víctimas de estos problemas. El festival otoñal Distrito Urbano, que cuenta con figuras como Becky G y Quevedo, se ha mudado del Wizink Center al Hipodromo de la Zarzuela, un recinto más pequeño y en ciudades como Caceres durante el verano se cayeron eventos de artistas españoles como la banda Izal o Melendi por la poca venta de entradas.
Lo más probable es que los grandes festivales no deban preocuparse. Es poco probable ver espacios como el MadCool o un Primavera Sound cancelados por no vender entradas, pero espacios más pequeños, o los conciertos en salas y bares, pueden verse golpeados por la situación. Lo que sí puede ser complicado es el fichaje de grandes artistas, por los que los festivales y los recintos tendrán que competir.
MUCHOS LANZAMIENTOS SIN SUFICIENTES TARIMAS
Este otoño viene cargado de lanzamientos de grandes artistas internacionales. Taylor Swift, Los Arctic Monkeys, The 1975, BlackPink, Paramore y Björk han confirmado lanzamientos, y los rumores parecen apuntar a que se puede sumar a Rihanna y Cardi B a esa lista. Son todos artistas que pueden equilibrar la balanza de un festival, y todos nombres que probablemente anuncien giras en los próximos meses.
Pero lo cierto es que no todos pueden tocar en todos los festivales. Un artista que esté firmado en el MadCool no se presentará en el Primavera de Madrid y viceversa. Eso hace que la competencia en el tras bambalinas para firmar talento tras bambalinas apunte a ser más encarnizada de lo usual. Lo cierto es que un cartel desequilibrado puede ser costoso para un festival, dejando algún día a medias o con un cabeza de cartel menos atractivo.
Para un festival nuevo como el Cala Mijas, o festivales de menor escala como el Dcode, cualquiera de estos nombres podría ser un fichaje clave, pero con los pesos pesados necesitados de grandes nombres la situación quizás se complique. Aunque la buena noticia es que esto podría abrir más espacios en las grandes tarimas para el talento local.
PROBLEMAS DE ESTAFAS
Otro problema que tendrán que enfrentar los festivales es el de las estafas en la venta de entradas. Un punto marcado este año donde la rapidez en la que se agotaron los grandes eventos hizo que muchos usuarios buscarán opciones en la reventa, y en muchos casos fueron engañados con transferencias bancarias ilegítimas, en ocasiones perdiendo hasta 600 euros por una entrada que no existía.
Por ahora el llamado de los festivales y productoras de eventos es a no recurrir a revendedores o plataformas dudosas. En cualquier caso, y a pesar del éxito de portales como Ticket Swap, la mejor manera de evitar estos problemas es no recurrir a revendedores.
En caso de tener que recurrir a la reventa lo importante es hacerlo a través de páginas de confianza y no pagar por vías como transferencias bancarias o pagos por Bizzum. En cualquier caso el año que viene será necesario para los festivales será un tema a tratar, en particular un año donde tendrá que mimar a los asistentes para no perderlos en un momento complicado.