De nuevo Madrid se convierte en capital mundial de un deporte, en este caso de uno tan de moda como el pádel. Desde este lunes acoge la fase final del Estrella Damm Comunidad de Madrid Master, el tercero de la temporada de un total de cuatro considerados de la máxima categoría de World Padel Tour. Son por tanto pocos y muy exclusivos eventos top del pádel mundial, y Madrid es uno de esos cuatro «puntos cardinales» de este deporte, recuperando su estatus perdido, cuando fue relegada a la segunda categoría (P1) de la serie de torneos Premier Padel.
Y es que Madrid se había ganado a pulso recuperar esa posición, con un deporte donde somos potencia en la élite pero también en el número creciente de practicantes. En los años 80 el pádel era una disciplina de gran aceptación en países de habla hispana como Argentina o Uruguay, pero en España apenas era una anécdota. Con la creación en 1987 de la Asociación Española del Pádel, precisamente en Madrid, se sentaron las bases de un despegue y crecimiento que no ha parado.
UN DEPORTE YA DEL PUEBLO PERO CON PRECIOS DE LUJO
Es la paradoja de cuanto más común es un deporte en cuanto a practicantes, el precio de las entradas pueden convertirse en un lujo. El pádel no es ya un deporte de clubs deportivos y urbanizaciones de gente adinerada. Cada fin de semana sobre todo se reúnen amigos de cualquier condición para disfrutar por parejas del pádel, en cualquier barrio de Madrid u otras ciudades españolas. Es ya mucho más común en la práctica que el tenis, en parte porque se disfruta más, requiere menos preparación física y técnica, y es curiosamente más económico.
Sin embargo, esta fiebre por el pádel trae consigo de que tiempo atrás se pudiera asistir a un torneo por muy poco dinero y ahora se ha llegado a que se pague por una entrada en el Madrid Master de hasta 90 euros, unos precios al nivel o superior de muchas entradas de tenis. Comparemos con los precios de Master 1000 de tenis Mutua de Madrid: supone tres veces más que un partido de primeras rondas en el torneo madrileño de la ATP y al nivel de muchas entradas de las rondas finales.
UN CRECIMIENTO NACIONAL Y MUNDIAL
El fenómeno del pádel no es exclusivo de España, si no que está siendo tendencia en gran parte del mundo. Es el deporte de moda, con la ventaja de serlo no sólo en cuanto a asistencia, sino en práctica. Es más, se practica más que se ve. En 2021 fue el deporte que más creció, según un informe de Playtomic y la consultora Monitor Deloitte.
Según el informe, la creación de nuevas pistas en Europa se ha triplicado desde 2016, contando en la actualidad con más de 27.000 y un crecimiento del 20% anual. Más espectacular es el crecimiento en el número de clubes en Europa: un 181% nada menos. Y suma y sigue, porque se espera que en los próximos años se lleguen a las 67.000 pistas. También ayuda el hecho de que hoy en día casi cualquier urbanización con zona comunes que se construye, se incluye una piscina comunitaria y al menos una pista de pádel, por encima de cualquier otro elemento.
ESPAÑA LIDERA EL CRECIMIENTO DEL PÁDEL
Y entre todos los países europeos, España es la que más crece en este deporte, por encima de Italia, Suecia, Francia y Bélgica. Además, España es junto a Suecia, Portugal o Finlandia, donde el número de pistas de pádel ya superan a las de tenis (en concreto, en España ya es de 14.000 frente a 13.385). En lo único donde no es líder es en inversión, donde le superan Suecia e Italia.
Esto se refleja por tanto en la ambición de los países por albergar una torneo de máxima exigencia. Las cifras online también son significativas. Si en 2016 las visualizaciones del World Padel Tour eran de 22 millones, en 2021 era ya de 145, con crecimientos en datos tan importantes como los seguidores en Instagram a jugadores de pádel, de entre un 100 y un 500%.
EL CASO DE MADRID
La Comunidad de Madrid es, dentro de España, un centro neurálgico del pádel, lo que se refleja en la vuelta a la élite en el World Padel Tour. La Comunidad cuenta con cerca de 2.000 pistas y 118 clubes inscritos, siendo es la única región en España que supera el ratio de una licencia por kilómetro cuadrado, una cifra que aspira a seguir aumentando gracias a los esfuerzos en materia de formación de una Federación Madrileña (FMP).
El pádel femenino también está en pleno auge, representando una tercera parte de las casi 9.000 licencias reportadas por la FMP. Y las palistas madrileñas, un 9% del total de las jugadoras federadas a nivel nacional. Estos datos revelan la gran aceptación de este deporte en una comunidad que vuelve a dar la bienvenida al circuito femenino después de haber sido excluido de nuevo en la pasada cita madrileña de la Premier Padel.
World Padel Tour sigue siendo el único escenario que permite la inscripción de las mejores palistas del mundo. Y Madrid no es una excepción. Además, y tal y como viene sucediendo en el resto de torneos de World Padel Tour en sus distintas categorías, jugadoras y jugadores se repartirán en la principal cita anual de Madrid con el pádel la misma bolsa en premios (en este caso, más de 112.000 euros al tratarse de un torneo Master).
