Conocida también como róbalo, la lubina es uno de los pescados más populares para servir en la mesa durante las fiestas navideñas. Su rico sabor, fácil, cocción y jugosidad, suele aprovecharse para preparar los más variados platillos; y aunque su preparación más famosa sea la lubina a la sal, esta también suele prepararse directamente al horno.
Dado su sabor, consistencia de la carne y versatilidad, este pescado suele servirse en grandes mesas y su preparación suele ser de vieja data; aunque no hay que negar que estuvo relegada por mucho tiempo tras la merluza y el bacalao. Si tienes algunas dudas relacionadas sobre cómo es mejor prepararla, quédate a conocer cómo queda más jugosa y lo que puedes hacer para convertirla en todo un manjar en tu mesa.
6Lo que debes tomar en cuenta cuando la preparas al horno
A diferencia de la preparación a la sal, en el caso del pescado al horno, este debe abrirse para sazonarlo en su interior y de hecho, aromatizarlo mejor.
Si bien, algunas recetas las preparan a la espalda, una lubina entera y con cabeza incluida, resultará más jugosa y sabrosa. Por otro lado, en caso de comprar el pescado cortado en ruedas, solicita que este sea en rodajas del mismo tamaño y grosor; solamente así podrás garantizar una cocción pareja, evitando que unos queden crudos y otros sobre cocinados.