Conocida también como róbalo, la lubina es uno de los pescados más populares para servir en la mesa durante las fiestas navideñas. Su rico sabor, fácil, cocción y jugosidad, suele aprovecharse para preparar los más variados platillos; y aunque su preparación más famosa sea la lubina a la sal, esta también suele prepararse directamente al horno.
Dado su sabor, consistencia de la carne y versatilidad, este pescado suele servirse en grandes mesas y su preparación suele ser de vieja data; aunque no hay que negar que estuvo relegada por mucho tiempo tras la merluza y el bacalao. Si tienes algunas dudas relacionadas sobre cómo es mejor prepararla, quédate a conocer cómo queda más jugosa y lo que puedes hacer para convertirla en todo un manjar en tu mesa.
4¿Queda jugoso este pescado a la sal?
Una de las mayores bondades de la lubina a la sal, es que, además de tratarse de un plato bajo en calorías y en el que el pescado queda perfectamente cocido, también es increíblemente jugoso.
Es precisamente la técnica de la sal, la que contribuye a que los jugos del pescado se conserven intactos en su interior; por esta razón, así se te pasen unos minutos dentro del horno, este quedará exquisitamente jugoso.