El pollo al ajillo es uno de los tantos platos típicos españoles que hacen agua la boca apenas de verlo. La carne de esta ave luce perfecta, aromática y con un sabor y jugosidad inigualable y es además un plato económico y fácil de hacer.
Este plato es tan sencillo que siempre sale bien, incluso a los que no tienen mucha experiencia en la cocina. Así que anímate a prepararlo y descubre una de las recetas más tradicionales para disfrutar de todo el potencial del pollo.
4Comienza limpiando y preparando el pollo para su cocción
Bien, sean cuales sean las piezas de pollo que vayas a preparar, una vez en casa, límpialas muy bien para eliminar el exceso de grasa. En caso de usar alitas, déjales la piel, pero de resto, elimina esta por completo.
Dejar la piel, solamente sumará calorías al plato y lo hará más grasoso, así que en la medida de lo posible, retírala por completo. Cuando tengas troceado el pollo y además lo tengas perfectamente limpio, salpimienta a tu gusto y reserva.