Muchas veces no sabemos qué hacer con el sobrante de nuestras recetas y, dependiendo de la cantidad, tirarlas no es una opción. Normalmente, esto suele suceder con el pollo que hemos usado para el caldo. Una buena forma de reutilizarlo es haciendo croquetas, debido a que son realmente sencillas de hacer, muy sabrosas y sin dudas los dejarán completamente satisfechos.
En este artículo te contaremos de qué manera puedes reutilizar el pollo para hacer unas fantásticas croquetas.
3Primer paso
Una vez que el caldo este completamente hecho, habrá que separar las piezas del pollo y dejar que se enfríen. Una vez que esto suceda, se lo desmigará, descartando las ternillas y los huesos. La idea de este punto es lograr que las piezas queden de un tamaño pequeño para que sea más sencillo armar las croquetas. Además, es necesario prestar mucha atención a los huesos, porque estos pueden acarrear complicaciones para quienes las degusten.