Esta es una advocación mariana de la Santísima Virgen conocida prácticamente en todo el mundo, y se la llama de los dolores porque con ella la Iglesia quiere recordar los siete dolores por los que pasó en la vida, al haber presenciado las penas por las que pasó su hijo Jesús. En España, más de 250.000 mujeres han sido bautizadas con el nombre de María Dolores, a las que deben sumarse otras 200.000 que fueron bautizadas con el nombre de Dolores, según los datos suministrados por el Instituto Nacional de Estadística, y si conoces a alguna, que no se te vaya a olvidar felicitarla el día de hoy por su onomástico.
Nuestra Señora de los Dolores
Nuestra Señora de los Dolores es la advocación mariana que nos recuerda los sufrimientos por los que pasó la Virgen María al tener que presenciar los martirios por los que tuvo que pasar su hijo. De hecho, para la Iglesia fueron 7 los grandes dolores de la Virgen, por los siete episodios de la vida de Cristo que se encuentran recogidos en las cuatro Evangelios del Nuevo Testamento, Tomás, Marcos, Lucas y Juan. Simeón profetizó que cuando naciera Jesús, una espada iba a atravesar el alma de su madre, y los siete dolores se encuentran documentados en la Biblia en el siguiente orden: la huida hacia Egipto debido a la persecución de Herodes; los tres días que pasó la Virgen buscando a su hijo extraviado que fue encontrado en el templo; su encuentro con su hijo cuando estaba cargando la cruz después de haber sido condenado; la crucifixión propiamente dicha y la muerte de su hijo, que fue presenciada por ella, por María Magdalena y por el Apóstol Juan; cuando la Virgen María lloró sobre el cadáver del Señor al ser bajado de la cruz y; por último, el momento en el que fue sepultado.
La veneración de la Virgen doliente es una larga tradición que se remonta al siglo XIII, aunque se dice que esta conmemoración podría datar del siglo XI. Pero fue la orden religiosa de los Siervos de María, que nació en la ciudad de Florencia, la que desde el año 1239 comenzó a promover esta conmemoración a los dolores sufridos por la Virgen María.
Pero el santoral del 1 de septiembre no se agota con la conmemoración de Nuestra Señora de los Dolores, al contrario, el Santoral Católico también recuerda en este día los nombres de otros santos y beatos que realizaron obras extraordinarias en su vida o que sufrieron por causa de la fe, de modo que se convirtieron en claros ejemplos de los más excelsos valores cristianos, entre los que podemos mencionar a San Aicadro de Jumieges, San Alpino de Lyon, San Apro de Toul, San Nicetas Godo, San Nicomedes de Roma, San Valeriano de Tournus, Santa Catalina Fieschi, Beato Antonio María Schwartz, Beato Camilo Costanzo, Beato Ladislao Miegon, Beato Pablo Manna, Beato Pascual Penadés Jornet y Beato Rolando de Médicis.