La pechuga de pollo es una de las partes de esta ave que puede considerarse más magra, firme y compacta para preparar platillos de sabor asombroso; sin embargo, generalmente se utiliza para prepararla a la plancha o rebozada y pocas veces se aprovecha al máximo.
Si bien, esta es una parte del pollo que es muy buscada por quienes prefieren proteínas de excelente calidad y bajo aporte de grasas, lo cierto es que es un desperdicio no prepararla en diferentes recetas deliciosas. Hoy traigo para ti 5 propuestas diferentes, que empiezan ya mismo, con una combinación que será interesante y deliciosa.
2Cómo preparar este delicioso plato
Comienza llevando a dorar a una sartén bien caliente con aceite de oliva, las pechugas de pollo limpias y salpimentadas a tu gusto. Una vez que estén doradas por ambas caras, retíralas a un plato y resérvalas. Disminuye el fuego y en la misma sartén sofríe la cebolla junto al jengibre finamente picado. Salpimienta y deja cocinar por unos 10 minutos.
Transcurridos los 10 minutos, añade el membrillo cortado en trocitos y cocina hasta que se deshaga. Vierte el vino dulce, la nuez moscada, el clavo y deja que el alcohol se evapore. Regresa las pechugas a la sartén y vierte el caldo de pollo cubriendo perfectamente todo. Deja cocinar durante 40 minutos removiendo de vez en cuando y añadiendo un poco de caldo si el líquido se seca demasiado. Listo, ¡A comer!