Manos Unidas ha alertado de la cronificación de la pobreza y aumento de la desigualdad para las 773 millones de personas de todo el mundo que siguen sin alfabetizar, de las que dos terceras partes son mujeres, según datos de la Unesco.
Con motivo del Día Internacional de la Alfabetización, que se celebra este jueves 8 de septiembre, y en el marco de su campaña ‘Nuestra indiferencia los condena al olvido’, Manos Unidas ha lamentado que la realidad no cumpla el derecho a la educación ratificado por diversos acuerdos internacionales y legislaciones nacionales.
«El analfabetismo es sinónimo de falta de oportunidades, de déficit de participación, de cronificación de la pobreza y de aumento de la desigualdad«, ha recordado al respecto María José Hernando, del departamento de Estudios de la organización.
En este sentido, ha avisado de que las mujeres y las niñas son las más afectadas por estas carencias derivadas de la falta de alfabetización debido a la desigualdad en el reparto de las tareas en el hogar, así como las costumbres y tradiciones de ciertas comunidades.
«Mientras sobre las mujeres y las niñas sigan recayendo la gran mayoría de las tareas del hogar, perdurará esa desigualdad en materia de educación«, ha criticado, para clamar también contra costumbres como el matrimonio infantil.
Asimismo, Hernando ha señalado que las personas sin alfabetizar desconocen, en muchas ocasiones, que tienen derechos o cómo ejercerlos, lo que «alimenta el círculo de la pobreza«.
En este contexto, Manos Unidas lleva a cabo distintas iniciativas para enfrentar la situación. De hecho, en 2021 la ONG aprobó 108 proyectos de carácter educativo por un importe superior a los 6,5 millones de euros, para apoyar directamente a 154.000 personas.
Uno de ellos se ubica en Benín, donde Manos Unidas colabora con los Padres Salesianos en un proyecto de apoyo a la educación y fomento de la alfabetización. La iniciativa, localizada en Parakou, tiene como objetivo construir un complejo escolar en el que niños y niñas tengan acceso a una educación de calidad.
Esta intervención está destinada a apoyar directamente a 706 personas: 330 niñas, 270 niños, 100 mujeres, cinco profesoras y un profesor. De forma indirecta el proyecto beneficiará a las familias de estas los participantes, lo que supone un total de más de 3.500 personas, ha detallado la organización.