La crema chantilly es una de las recetas primordiales de la repostería francesa y es perfecta para acompañar los postres más delicados y las frutas frescas. Con una consistencia muy aireada y sublime, suele estar presente en postres en los que la delicadeza es la mejor carta de presentación.
Esta creación del cocinero francés Francois Vatel, debe su nombre a su debut en el castillo de Chantilly, cuando Vatel la preparó para el rey Luis II. Si bien, su consistencia es similar a la de un merengue italiano, la crema chantilly es en realidad muy diferente, e incluso, muy fácil de preparar, sobre todo si sigues estos trucos que te ayudarán a tenerla siempre perfecta.
4El frío, clave para que la crema chantilly monte en segundos
Al tener un porcentaje de materia grasa elevado como base principal, el calor es el principal enemigo de la crema chantilly; es por esta razón que para montarla, esta debe encontrarse perfectamente fría, entre los 2 y 4°.
Además de necesitar que la crema se encuentre muy fría, necesitas también que el bol y los utensilios se encuentren bastante fríos; por lo tanto, mételos al congelador por 10 minutos antes de usar.