Cuando preparamos un bizcocho en casa, uno de nuestros objetivos es que quede lo más esponjoso posible. Queremos que le bizcocho suba un montón y tenga una miga tierna y jugosa que solo con verla se te hace la boca agua. Esos son los bizcochos que más nos gustan y los que preparaban nuestras abuelas, dejando la casa increíblemente perfumada. Son pocos los ingredientes que se necesitan para preparar este dulce básico: huevos, harina, levadura y azúcar, aunque podemos darle un toque de sabor especial. Es perfecto para disfrutar solo o acompañado de una bebida caliente.
3PRIMER PASO PARA EL BIZCOCHO SUPERESPONJOSO
Lo primero de todo es preparar el molde colocando papel de hornear de forma que cubra la base y los laterales, de forma que sobresalga un poco por encima del borde del molde. Después lo untamos con mantequilla o margarina y lo reservamos para más tarde. Ahora toca batir los huevos. Los cascamos en un bol grande, y añadimos el azúcar y la ralladura de limón. Batimos con las varillas eléctricas primero a velocidad media, y una vez que se haya mezclado todo, ponemos al máximo. Hay que batir durante unos 10 minutos hasta que los huevos tripliquen el volumen y la mezcla tenga un aspecto similar a un merengue. Si tenemos un robot de cocina esta tarea será más sencilla, pero con paciencia se puede conseguir también a mano.