Las hormigas son insectos muy comunes y es fácil verlas en los caminos, en los parques y en el campo. En verano cobran protagonismo, ya que salen de sus guaridas para proveerse de comida y acumularla bajo tierra para alimentarse sin escaseces durante el invierno. Como todos los insectos tienen una importancia crucial dentro del ecosistema y como apuntan los expertos, la vida en la tierra colapsarla en pocos días si desapareciesen estos pequeños bichejos.
No obstante, su presencia en nuestras casas no nos gusta, y una vez que entra uno, si no se mantiene a raya, se puede convertir en plaga. Durante los meses de calor es fácil que las hormigas se intenten adueñar de nuestras cocinas, atraídas por los olores de los alimentos y el fácil acceso cuando tenemos las ventanas abiertas. Por suerte, hay algunos trucos para ahuyentarlas e invitarlas a que se vayan a buscar comida a otra parte.
5MENTA
Si además de espantar a las hormigas quieres tener una casa agradablemente perfumada, la menta será tu gran aliada. Su característico olor es demasiado fuerte para estos insectos de delicado olfato, y prefieren evitar las zonas mentoladas. Si tenemos localizados los puntos de acceso de las hormigas, o las superficies por donde suelen aparecer buscando comida, simplemente tenemos que colocar unas hojas de menta en estas zonas. El aceite esencial de menta también es una buena alternativa. Podemos impregnar un algodoncito y ponerlo en esos puntos, o bien mezclar unas gotas con agua en un spray, y pulverizar.