Si los más pequeños de casa (y algunos adultos también) arrugan la cara si ofreces espinacas, estas croquetas deliciosas y crujientes los dejarán sin excusas válidas para animarse a comerlas.
Así que, si siempre estás comiéndote la cabeza, buscando la manera de convencerlos para que coman más verduras y vegetales, con esta receta, dejarás de insistir y serán ellos los que la pidan como locos. Un plato muy fácil de hacer, con pocos ingredientes y también delicioso. Veamos la receta perfecta para unas exquisitas croquetas de espinacas, y anímate a prepararlas.
6Así comienzas a preparar la bechamel
Transcurridos los 5 minutos de cocción de las espinacas con la cebolla pochada, es momento de comenzar a preparar la bechamel, para la cual, la base de cebolla, mantequilla y espinacas, será perfecta para poner a cocinar la harina directamente y preparar una especie de roux.
Agrega la harina de golpe sobre las espinacas y remueve rápidamente para que se integre a la mezcla sin dar tiempo a que se formen grumos. Mezcla muy bien la harina, así esta quedará perfectamente integrada a las verduras y se comenzará a cocinar para perder el sabor a crudo.