Los pinchos morunos tienen su origen en África, donde empezaron a elaborarse con carne de cordero por los pueblos árabes. Hoy en día, en cambio y dada su popularidad, es habitual que se cocinen con todo tipo de carnes, como pollo, pavo, ternera o, por supuesto, cerdo. Y aunque su elaboración es sencilla, cada cual tiene su “truquito” para darle un toque personal.
En esta ocasión vamos a darte unos cuantos consejos para que te queden de rechupete, además de detallar cómo hacer el plato paso a paso.
3El adobo, lo más importante de unos pinchos morunos
Preparar el adobo de unos pinchos morunos es francamente sencillo. Solo hace falta coger un mortero y machacar en él tanto el cilantro como el comino, lo mismo que los ajos (previamente pelados). Luego se añade sal y se machaca un poco más hasta que la mezcla quede un poco densa, por así decirlo.
Seguidamente se le echa también un chorrito de aceite (con muy poco es suficiente), el resto de especias y el zumo de limón que hemos exprimido. Uno de los mejores consejos que os podemos dar es el de usar siempre cilantro fresco, para que los pinchos queden más sabrosos.