A pesar del eterno debate en torno a lo que se debe o no se debe desayunar, es inevitable relacionar las galletas con el desayuno. Durante nuestra infancia, desayunar galletas con leche era nuestro día a día, un ritual antes de coger la mochila e ir al colegio. Hay miles de marcas de galletas, desde las clásicas campurrianas, hasta las galletas Príncipe rellenas de chocolate, pero te vamos a abrir los ojos y desmantelar la mentira que llevas años viviendo. Las mejores galletas son las caseras y nunca una marca va a conseguir replicar el sabor de las masas recién horneadas. ¿No sabes hacer galletas en casa? No te preocupes, siguiendo estos sencillos pasos conseguirás unas galletas sabrosas y caseras en menos de dos horas.
3SEGUNDO PASO: AMASAR CON LAS MANOS LA MEZCLA
Cuando tengamos todos los ingredientes en el bol, vamos a empezar a amasar la mezcla. La clave para conseguir una mezcla homogénea es tratarla con cuidado, mimar la mezcla. Para ello, vamos a utilizar la mejor herramienta que tenemos en la cocina, nuestras propias manos. Poco a poco amasamos la masa tratando de ir deshaciendo la mantequilla con la yema de los dedos junto a la harina, la sal y el azúcar, con esto conseguiremos que se mezclen todos los ingredientes.