A pesar del eterno debate en torno a lo que se debe o no se debe desayunar, es inevitable relacionar las galletas con el desayuno. Durante nuestra infancia, desayunar galletas con leche era nuestro día a día, un ritual antes de coger la mochila e ir al colegio. Hay miles de marcas de galletas, desde las clásicas campurrianas, hasta las galletas Príncipe rellenas de chocolate, pero te vamos a abrir los ojos y desmantelar la mentira que llevas años viviendo. Las mejores galletas son las caseras y nunca una marca va a conseguir replicar el sabor de las masas recién horneadas. ¿No sabes hacer galletas en casa? No te preocupes, siguiendo estos sencillos pasos conseguirás unas galletas sabrosas y caseras en menos de dos horas.
2PRIMER PASO: AÑADIR EN UN BOL LA HARINA
Antes de ponernos manos a la obra, hay que recordar que esta es una receta para todo el público, es decir, que no se necesita años de experiencia en la cocina o una estrella Michelin para cocinar esta receta de galletas caseras. Lo primero que tenemos que hacer es coger un bol grande y añadir la harina. No hace falta que tamicemos la harina, ya que luego vamos a amasarla bien para que nuestras galletas no tengan ningún grumo. A la harina le añadimos una pizca de sal, azúcar y mantequilla fría.