Un bonito y rico brazo gitano siempre ocupa un lugar de relevancia en la mesa y la razón es muy sencilla: además de tener una muy buena presencia, en su interior suele albergar los más ricos rellenos.
Si estás acostumbrado a probarlo en su versión dulce, tienes que descubrir el placer de degustarlo con un rico relleno salado. Es por eso que hoy traigo para ti ambas recetas, una para que puedas disfrutarlo para una comida y otra para que sea el postre para cerrar con broche de oro.
3Prepara la masa
Comienza encendiendo el horno a 180 °C y forra una bandeja con papel de horno. Mezcla hasta blanquear los huevos y el azúcar y añade la harina tamizada junto a la sal. Incorpora los ingredientes secos de manera envolvente y una vez que obtengas una mezcla homogénea, viértela en la bandeja que tienes preparada.
Lleva la bandeja al horno y déjala por 12 minutos. Tras este corto tiempo, el bizcocho del brazo gitano estará completamente listo. Al retirar el bizcocho del horno, desmóldalo aún caliente y colócalo sobre un paño húmedo. Desecha el papel de hornear y enróllalo con la ayuda del paño del lado más ancho.