Las patatas fritas son uno de los alimentos preferidos de los chicos y los no tan chicos. Son sumamente sencillas de hacer, sin embargo, muchas veces no quedan crujientes, o por lo menos, no como uno quisiera. En este artículo te contaremos un truco para que logres conseguir la textura y el sabor cómo si estuvieran hechas en un restaurante de primer nivel. La idea es que no estén ni muy cocinadas, ni demasiado aceitosas, pero si súper crujientes. ¡Quédate y toma nota!
6Una cuestión de tiempo: Puré o patatas fritas
Cuando nuestras patatas estén perfectamente cortadas, habrá que introducirlas al agua hirviendo durante aproximadamente un minuto. Con este paso lograremos quitar una gran cantidad de almidón de nuestro alimento y conseguiremos que las mismas tengan una textura mucho más suave. Es imperioso no dejarlas mucho tiempo para que no se cocinen, si no tendremos que hacer un puré en vez de patatas fritas.