La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha resaltado que el sistema sanitario de Ucrania «ha logrado sobrevivir» a los seis meses de guerra con Rusia y «aún es resistente», pese a que está «gravemente afectado».
«Seis meses de guerra han tenido un impacto devastador en la salud y la vida de los ucranianos, pero a pesar de los muchos desafíos, el sistema de salud ha logrado sobrevivir y prestar atención donde y cuando más se necesita. Pero ningún sistema puede proporcionar una salud óptima a su población bajo el estrés de la guerra, por lo que seguimos pidiendo a Rusia que ponga fin a esta guerra», dijo el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS. La OMS ha ayudado a entregar más de 1.300 toneladas métricas de suministros médicos críticos en coordinación con el Ministerio de Salud ucranianos y sus socios.
Además, ya hay acordadas nuevas entregas, que están en camino. Entre ellos se encuentran generadores de energía, ambulancias y suministros de oxígeno para instalaciones médicas; suministros para traumatismos y cirugías de emergencia; y medicamentos para ayudar a tratar las enfermedades no transmisibles (ENT). Los ataques a la sanidad ucraniana no cesan, y en el último semestre se han registrado 473 ataques verificados por la OMS, con el resultado de al menos 98 muertos y 134 heridos.
«Lo he dicho antes y lo repetiré una y otra vez: los ataques a la atención sanitaria son inconcebibles. No sólo constituyen una violación del derecho internacional humanitario, sino que además matan y mutilan a civiles y proveedores de atención sanitaria, y dificultan gravemente o impiden la prestación y el acceso a la atención sanitaria a quienes más la necesitan. En medio del horror de la guerra, seguimos siendo testigos de los heroicos esfuerzos de los profesionales sanitarios, que son un orgullo para su profesión a pesar de su propio sufrimiento personal», ha comentado el director regional de la OMS para Europa, Hans Henri P. Kluge.
En lo que va de año, la OMS ha ayudado a formar a más de 9.000 trabajadores sanitarios en una serie de cuestiones como la cirugía de traumatismos, las víctimas masivas, la exposición química, la epidemiología y los diagnósticos de laboratorio.
La salud mental es otro punto clave. Se está impartiendo formación sobre la gestión del estrés a los trabajadores sanitarios y a la población en general sobre cómo salvaguardar la salud mental, dado el fuerte aumento del malestar psicológico relacionado con la guerra.
«La OMS está intensificando sus esfuerzos con el Ministerio de Salud ucraniano para garantizar que el personal sanitario esté preparado con las habilidades necesarias para responder a las crecientes necesidades a medida que se acerca el invierno. Ya estamos viendo graves problemas y escasez en muchas zonas, con un aumento de las desigualdades en el acceso a la salud y a otros elementos esenciales, que afectan, como siempre, a los más vulnerables: las mujeres, los niños y los ancianos. Aunque esperamos que se restablezca la paz, debemos centrarnos en el aquí y el ahora: los próximos seis meses podrían poner a prueba el sistema sanitario de Ucrania como nunca antes», ha indicado el representante de la OMS en Ucrania, Jarno Habicht.